El huerto escolar constituye un modelo a escala reducida de la organización y de las relaciones entre el ser humano y la naturaleza.
El huerto escolar es una herramienta didáctica que permite poner en práctica un gran número de competencias y disciplinas simultáneamente. A través de diferentes tipos de actividades podremos suscitar la curiosidad del alumnado y promover su interés por aprender conceptos, habilidades, actitudes y valores relacionados con el medioambiente y la sostenibilidad pero también con prácticamente cualquier área de aprendizaje.
La actividad pedagógica en torno a la utilización del espacio escolar como sustrato para la realización de actividades de aproximación al medio y las acciones humanas implicadas en su aprovechamiento hacen del huerto escolar ecológico una herramienta multidisciplinar que favorece el trabajo en equipo y la convivencia.
Asimismo, la importancia del acercamiento del alumnado a la cultura rural y a la agricultura de autoabastecimiento y ecológica como recursos educativos representa uno de los pilares básicos de nuestro futuro.
Por otro lado, la necesidad de recuperar el acervo histórico y cultural de los pueblos enraizados en su tierra. Comunidades que han desarrollado estrategias específicas en su relación con el medio y que se expresan en tradiciones agrícolas aún perdurables, hacen más que recomendable el incorporar a la cultura escolar este recurso vivencial y etnográfico de primer orden como fórmula para identificar a la actual y futuras generaciones con el lugar en que viven.
El huerto escolar constituye un modelo a escala reducida de la organización y de las relaciones entre el ser humano y la naturaleza y, con las dificultades que comporta el uso de modelos en didáctica, puede potenciar la comprensión de los conceptos medioambientales.
Entre los objetivos que podemos plantearnos en el desarrollo de nuestro huerto escolar podemos destacar:
Aprovechar el potencial del huerto escolar ecológico y la experimentación en entornos cercanos para trabajar e integrar las competencias, así como para diseñar tareas, situaciones de aprendizaje y experiencias significativas para el alumnado.
Vincular la integración de las competencias con los proyectos y tareas del huerto escolar ecológico, como recurso y estrategia para la innovación y mejora de los centros educativos.
Utilizar las tecnologías de la información y la comunicación como herramientas para comunicar y compartir información y las buenas prácticas desarrolladas en los centros educativos.
Analizar los mecanismos básicos que rigen el funcionamiento del medio físico y natural y las repercusiones de las acciones humanas sobre el mismo.
Elaborar estrategias de identificación y resolución de problemas en los diversos campos del conocimiento.
Favorecer la adquisición de actitudes y hábitos encaminados a fomentar y valorar la salud medioambiental, la consecución de una alimentación sana y responsable a través del conocimiento de los productos que consumimos, su origen y sus posibilidades culinarias.
Existe multitud de bibliografía relativa al tema de los Huertos Escolares pero me gustaría recomendar específicamente una obra clásica, con ya algunos años, que considero de notable interés para iniciarse en esta cuestión. En concreto me refiero a, «La Guía de Huertos Escolares» de Carlos Romón, publicada en 1997 por la Editorial Popular.
En definitiva, el huerto escolar ecológico es un recurso didáctico fantástico para promover el aprendizaje integral de nuestro alumnado y por ello ya muchos centros educativos lo han implantado. ¡No esperes más y anima a crear el tuyo en tu centro!
En el Día Mundial del Medio Ambiente, es interesante recordar que la tan necesaria Educación en Valores encuentra en el cine un gran aliado para su desarrollo en el ámbito educativo.
En el Día Mundial del Medio Ambiente (5 de junio), no descubrimos nada nuevo al afirmar que el cine puede ser utilizado en las aulas como un recurso didáctico de incomparable valor en todas las etapas educativas. El visionado de películas o de partes seleccionadas de las mismas, puede dar píe al desarrollo de multitud de actividades que contribuyan a la adquisición de conocimientos así como a animar el debate y análisis respecto a cualquier aspecto de nuestra historia o de la realidad actual.
Igualmente, la tan necesaria Educación en Valores encuentra en el cine un gran aliado para su desarrollo en el ámbito educativo. En este sentido, son muchos los filmes que abordan temáticas interesantes desde el punto de vista de la ecología, la protección del medio ambiente y la sostenibilidad.
De entre los muchos títulos que podríamos referir, entresaco una pequeña selección personal de cuatro largometrajes que abordan con notable rigor y profundidad, al tiempo que con una visión amena, problemas de absoluta actualidad medioambiental como el consumo irresponsable, la obsolescencia programada, la pérdida de biodiversidad o el cambio climático, entre otros. Espero resulten de interés.
Comprar, tirar, comprar
Cosima Dannoritzer (España, 2010).
La realizadora alemana Cosima Dannoritze dirige esta reveladora historia que explica por qué los productos que compramos duran cada vez menos debido a la programación de la obsolescencia de los objetos para incrementar el consumo. ¿Existen bombillas eternas?, ¿Cómo se puede usar un chip para ‘matar’ un producto cuando llegue a un determinado número de usos? Éstas y otras muchas preguntas encuentran respuesta en este reportaje, en cuya realización participó RTVE y otras televisiones europeas. El documental fue rodado en Cataluña, Francia, Alemania, EE.UU. y Ghana, un país africano que se ha convertido en el vertedero de la «basura electrónica» de Occidente.
Home
Yann Arthus-Bertrand (Francia, 2009).
En sus 200.000 años de existencia, el hombre ha roto el equilibrio de casi 4.000 millones de años de evolución de la Tierra. El precio a pagar es considerable pero es demasiado tarde para ser pesimistas. A la humanidad le quedan diez años escasos para invertir la tendencia, concienciarse de la explotación desmesurada de las riquezas de la Tierra y cambiar el modo de consumo. Yann Arthus-Bertrand, con sus imágenes inéditas de más de 50 países vistos desde el cielo, compartiendo con nosotros su capacidad de asombro y también sus preocupaciones, coloca, con esta película, una piedra en el edificio que tenemos que reconstruir, todos juntos.
Tierra, la película de nuestro Planeta
Alastair Fothergill, Mark Linfield (Reino Unido, 2007).
Un fascinante viaje por la Tierra, de norte a sur y a lo largo de las cuatro estaciones, para retratar los contrastes entre las diferentes partes del planeta y sus transformaciones naturales. Las condiciones de supervivencia de algunas especies animales y su comportamiento natural, en ocasiones con elementos muy cómicos, forman parte también de un extraordinario documental realizado con las más sofisticadas técnicas. Con más de 200 locaciones en 26 países diferentes, y nada menos que 250 días de fotografía aérea. Un descomunal trabajo que logra mostrar con todo esplendor la belleza del reino animal, al tiempo que alerta sobre su progresivo y preocupante peligro de desaparición.
Una verdad muy incómoda: ahora o nunca
Bonni Cohen, Jon Shenk (Estados Unidos, 2017).
Una década después de rodar Una verdad muy incómoda, el exvicepresidente estadounidense y activista ambiental Al Gore vuelve a la carga con una secuela que renueva las aspiraciones de la lucha contra el cambio climático.
En Una verdad muy incómoda: ahora o nunca, dirigida por Bonni Cohen y Jon Shenk; Al Gore presenta como reales y actuales algunas de amenazas de las que avisaba en su cinta de 2006, lo que dota de un mayor poder argumentativo a la producción. El metraje acompaña al exvicepresidente en su viaje alrededor del globo para intentar influir en la política climática mundial a la vez que presenta posibles soluciones de mitigación y adaptación que todavía estamos a tiempo de poner en marcha para frenar el calentamiento global.
Before the flood
Fisher Stevens (Estados Unidos, 2016).
Otra reconocida figura mundial que está centrando sus esfuerzos en la lucha contra el cambio climático es el actor Leonardo DiCaprio, que en 2016 produjo junto al director Martin Scorsese el documental Before the flood.
En el documental, estrenado de manera gratuita en Internet, se analiza cómo podemos prevenir problemas ambientales como la desaparición de especies en peligro de extinción, ecosistemas naturales o comunidades indígenas amenazadas, todo ello con una rigurosa pero atractiva presentación a cargo del propio Leonardo DiCaprio y la participación de personalidades como Barack Obama, Bill Clinton, Ban Ki-moon, investigadores de la NASA, conservacionistas forestales, reputados científicos, líderes de la comunidad y activistas ambientales.
Y como siempre me gusta recordar en este tipo de post, este blog no recibe ningún tipo de recompensa por la recomendación de las obras señaladas más allá del mero placer (que no es poco) de ayudar a divulgar aquello que considero de interés.
Seis obras sobre ecología, medioambiente y sostenibilidad de especial interés para el público más joven por su calidad y valor didáctico.
El futuro de nuestro mundo está en nuestras manos y, especialmente, en manos de los más jóvenes. El cambio climático, la destrucción de la biodiversidad, la desertificación progresiva o el consumo desmedido e irracional son variables de un mismo problema que se traduce en la irremediable destrucción de nuestro medio natural y, consecuentemente, de nuestro planeta tal cual lo conocemos.
Solo mediante un cambio profundo de paradigma en las relaciones que establece el ser humano con su entorno será posible frenar la actual escalada hacia un completo desastre medioambiental de impredecibles consecuencias. En este terreno y aunque la responsabilidad es colectiva, la concienciación de las generaciones jóvenes es prioritaria por lo que la escuela y la educación en general deben jugar un rol esencial en la extensión de los valores ecológicos que nos deberán permitir invertir la actual situación.
Aunque existen multitud de libros sobre el tema orientados hacia el público infantil y juvenil, me permito seleccionar y recomendar seis obras que considero de especial interés por su calidad y notable valor didáctico.
El jardín curioso
Autor: Peter Brown. Editorial: Takatuka Albumes (2010).
Edad: A partir de 3 años.
Liam vive en una gran ciudad. Un día, mientras da un paseo, descubre un jardín que está medio abandonado. Entonces decide cuidarlo plantando más árboles y regándolos hasta que, poco a poco, el jardín crece y se extiende por toda la ciudad. Con muchas ilustraciones, ayuda a comprender la importancia y el respeto a la naturaleza.
El viaje de Papelote
Autores: Javier Sáenz Pinillos (Autor) y Julen Rodríguez Ruiz (Ilustrador). Editorial: iajajai (2017).
Edad: A partir de 5 años.
Papelote es un árbol que vive en el Amazonas y que, un día, unos hombres se lo llevan para convertirlo en papel. Viaja lejos de su hogar y se instala en el escaparate de una tienda con su nueva forma. El protagonista habla en primera persona con el lector contándole sus miedos, esperanzas y sentimientos. Uno de los libros sobre el medioambiente que más se está utilizando en las aulas por la sencillez del lenguaje y la facilidad con la aborda el tema de la tala de árboles.
Cuentos por el clima
Autoras: Magela Ronda y Raquel Sánchez Pros. Editorial: Alfaguara (2020).
Edad: A partir de 6 años.
Cuentospor elclima nace para dar voz a todas esas personas que luchan, día a día, por hacer de nuestro mundo un lugar mejor en el que vivir. Un sitio bueno y agradable no solo para nosotros, sino también para las futuras generaciones, que serán quienes hereden el planeta.
Wangari vivía rodeada de árboles. Cuando crece, comienza una masiva deforestación y Wangari teme que pronto todo el bosque sea destruido. Decide sembrar nueve arbolitos e iniciar una acción ecologista en favor de la reforestación. Una historia real sobre la vida de Wangari Maathai nacida en una pequeña aldea de Kenia, que recibió el Premio Nobel de la Paz en 2004.
Cuentos para niños y niñas que quieren salvar el mundo
Autores: Carola Benedetto y Luciana Ciliento. Editorial: B de Block (2019).
El objetivo principal de este libro es despertar la conciencia ecológica y el compromiso con el medioambiente en niños y niñas de todas las edades. Para ello, se vale de la historia de 16 personas entre las que se encuentran Leonardo di Caprio, Emma Watson o la adolescente Greta Thunberg. Así, se presenta en forma de antología para conocer su compromiso activo con el medioambiente y con el cuidado del planeta desde sus diferentes perspectivas y ámbitos.
La joven activista Greta Thunberg ha conseguido movilizar a jóvenes de todo el mundo para luchar contra el cambio climático. Este libro aprovecha su lucha y sus principales líneas de actuación para explicar qué es exactamente este fenómeno, cuáles son sus consecuencias y qué se puede hacer para solucionarlo. Lo hace a través de un lenguaje cercano y adaptado a los más pequeños y, además, acompaña las explicaciones con ilustraciones de gran calidad.
Y como siempre recuerdo en este tipo de post, este blog no recibe ningún tipo de recompensa por la recomendación de las obras señaladas más allá del mero placer (que no es poco) de ayudar a divulgar aquello que nos parece de interés.
En la educación canaria es necesario acicalar en profundidad la casa, poner orden en el caos reinante y apostar por un nuevo equipo de gobierno cohesionado que se ponga a trabajar, con responsabilidad y desde el diálogo.
Fernando Pellicer Melo
Vaya por delante, previo a cualquier otra consideración, el máximo de los respetos hacia la Consejera de Educación saliente, Dña. María José Guerra Palmero, a la que solo procede desearle los mayores éxitos futuros en su vida profesional y personal.
La salida de la Administración educativa de la Sra. Guerra Palmero y su sustitución, previsiblemente de forma transitoria, por D. José Antonio Valbuena era, como ya he indicado reiteradamente, la “crónica de una dimisión anunciada” (o de una “una solicitud de cese aceptada” que tanto monta, monta tanto) que vino precedida, además, por la dimisión, durante el pasado fin de semana, del Director General de Innovación, Ordenación y Calidad, D. Gregorio Cabrera Déniz, aduciendo, y ahí es nada, “la falta de unidad de criterio en el proceso de desescalada educativa”.
El desencuentro, uno más dentro de la larga lista de crisis y enfrentamientos internos que ha caracterizado la cotidianeidad de la Consejería de Educación estos últimos meses, se produjo ante la inexplicable decisión de intentar descargar toda la responsabilidad de la desescalada educativa en los equipos directivos de los centros, sin previas instrucciones y protocolos claros respecto a cómo proceder, así como a la insistencia por reincorporar “deprisa y corriendo” a parte del alumnado a la actividad educativa presencial. De hecho, el viernes 22 de mayo a partir de las 15:00 horas (¡viva el derecho a la desconexión digital!) se remitieron a todos los centros educativos de Canarias una serie de deslavazados documentos, con indicaciones de comenzar la actividad presencial el ¡lunes 25 de mayo! Desde Innovación, partidarios, al igual que el conjunto de las organizaciones sindicales, de reforzar durante lo que resta del curso la actividad educativa a distancia y centrar los esfuerzos en la preparación del difícil curso 2020-2021, se había aceptado a regañadientes la posibilidad de una vuelta parcial a las aulas. Sin embargo, la chapucera decisión adoptada sin consenso interno el viernes pasado, poniendo en la picota a toda la Comunidad Educativa, precipitó los acontecimientos. A partir de ahí, la historia es conocida, dimisión del mencionado Director General, rebelión generalizada de los equipos directivos, estupefacción de familias y de las organizaciones sindicales y comparecencia pública del Presidente del Gobierno para, “sin querer queriendo” desautorizar a la Sra. Guerra Palmero y anunciar unas instrucciones a publicar el pasado domingo y que aún, para no romper la tradición, seguimos esperando. En definitiva, un “guirigay” monumental que amargó el fin de semana a más de uno y que culminó, momentáneamente, con el consabido anuncio de dimisión de la Consejera de Educación el pasado lunes por la mañana.
Valoraciones aparte, la renuncia, sorprendentemente en solitario, de la Sra. Guerra abre un nuevo escenario donde, a todas luces, resulta imprescindible recomponer a la mayor urgencia el organigrama de mando de la Administración educativa. Y decimos en solitario porque en ningún caso se ha producido el esperado cese de los cuadros intermedios de la Consejería que, como si con ellas/os no fuera el problema, pareciera que albergan la pretensión de mantenerse en sus puestos contra viento y marea. Más que llamativo fue comprobar cómo mientras la Consejera cesante se esmeraba la mañana del lunes en explicar, a diestro y siniestro, las razones de su renuncia ante los medios de comunicación, su mano derecha y, para muchos, Consejera en la sombra, Dña. Marisol Collado Mirabal, a la sazón aún Directora General de Personal, experimentaba por primera vez con un “Live” en Facebook para intentar explicar a cientos de docentes las “enigmáticas” razones de la eterna parálisis de todos y cada uno de los procedimientos abiertos precisamente en el ámbito de su área de gestión (listas de empleo, funcionariado en prácticas, Comisiones de Servicio, Adjudicación Provisional de destinos, nueva normativa de Licencias y Permisos…) para terminar, incluso, anunciando un nuevo “Live” en un futuro próximo. Loable iniciativa aunque curiosa, cuanto menos, dado que es de presuponer que los días de sillón de la referida Directora General de Personal así como del resto de cargos intermedios de la Administración educativa están contados. Pareciera que la Sra. Collado, con amplia y dilatada experiencia política y persona de reconocida confianza de Ángel Víctor Torres, estuviera apostando por aferrarse al cargo o, incluso, escalar posiciones en el escalafón, como si la vida le fuera en ello. Sorprendente o no tanto.
Quizás haya que considerar que el Presidente del Gobierno apuesta por cerrar este nefasto curso de la “mejor manera posible”, cambiando el timonel de la nave pero manteniendo, al menos de momento, al resto de la oficialidad. Si así fuera, podría incluso considerarse una estrategia válida puesto que no parece recomendable introducir grandes modificaciones en el organigrama a un mes vista de la finalización del curso escolar. Sea como fuere, esta actitud prudente en ningún caso puede obviar la ineludible necesidad de acicalar en profundidad la casa, poner orden en el caos reinante y apostar por un nuevo equipo de gobierno, ahora sí, cohesionado y que -abandonando las miserables rencillas políticas y luchas de poder- se ponga a trabajar, con responsabilidad y desde el diálogo con todos los sectores de la Comunidad Educativa, en la extremadamente compleja organización del próximo curso y, en definitiva, del futuro de la Educación Canaria. Nos va mucho en ello.
Porque, Sr. Presidente Ángel Víctor Torres, al menos en este caso, de ninguna manera quienes han sido parte activa del problema pueden pretender ahora ser la solución. El crédito ya se agotó.
Palabras hermosas, con sabor añejo y a tardes de lectura, que merecen ser rescatadas del olvido y quizá, incluso, hasta una segunda oportunidad.
Las palabras definen a las personas y también, en gran medida, las épocas. Si has sido, como supongo, lector de literatura infantil, novelas de aventuras o cómics clásicos seguro te habrás tropezado a lo largo de los años con infinidad de expresiones curiosas que, incluso en su momento, parecían ya vetustas. Insultos, interjecciones y exclamaciones de todo tipo que, en su mayoría, nadie de tu entorno utilizaba pero que en boca de Guillermo Brown, Tintín o, el mismísimo Capitán Trueno, se diría que encajaban a la perfección. Si bien solo con el catálogo de improperios del Capitán Haddok recogidos en los álbumes de Tintín tendríamos para varias entradas, en esta ocasión he preferido centrarme en aquellas interjecciones que a lo largo de los años han colmado las páginas de nuestras lecturas.
En tiempos pretéritos y, muy acentuadamente, durante la dictadura franquista, los creadores tuvieron que apañárselas con ingenio y mayor o menor fortuna, para insuflar “vida” a sus personajes al tiempo que sortear la estricta y en muchas ocasiones estrambótica censura que veía “perniciosas” influencias para los “ciudadanos de bien” en las cuestiones más nimias e inesperadas.
Y si complicado lo tenían los escritores, algo parecido o peor ocurría con los traductores que tenían que buscar o “inventar”, como en el caso de la expresión “Troncho” en las aventuras de Guillermo Brown de Richmal Crompton (que por cierto era mujer y no hombre), todo tipo de eufemismos para sortear la férrea censura franquista. Por no hablar de los cambios sutiles y no tanto que se veían obligados a introducir en las tramas como ocurría, en el mismo caso, con los pastores protestantes que generaban especial mortificación a los censores de la época. Ya lo decía en una entrevista en El País de hace ya unos años el administrador de la editorial Molino, Luis Antonio del Molino, «En los años cuarenta tuvimos que parar la publicación [de los libros de Guillermo Brown] porque cada vez que salía un pastor protestante, se lo cargaba la censura y así no podíamos seguir». Y es que claro, pensar que el nacionalcatolicismo imperante en la época pudiera permitir que nuestras tiernas mentes se perturbaran con curas que se podían casar resultaba a todas luces excesivo.
Las definiciones de la mayoría de los veinte términos seleccionados están extraídas, cuando ha sido posible por contemplarse el uso señalado, del Diccionario de la lengua española de la RAE. No es el caso, por ejemplo, de «¡Troncho!» o «¡Sapristi!» vocablos que no tuvieron el honor de ser considerados por la Academia como suficientemente dignos.
Palabras hermosas con sabor añejo, a tardes de lectura, a infancia y aventuras que merecen ser rescatadas del olvido y quizá, incluso, hasta una segunda oportunidad.
Y concluyo con lo más importante, no dudes en realizar tus aportaciones a través de los comentarios puesto que seguro que entre todos/as podremos enriquecer notablemente esta lista.
¡Atiza!
1.- Interjección. Coloquial. Usada para indicar sorpresa.
2.-Interjección. Coloquial. Usada para reprobar por incoherente o desatinado algo.
Tintín y Milu siempre alerta.
¡Canastos!
Interjección. Usada para indicar sorpresa.
¡Caracoles!
Interjección. Caramba.
¡Caramba!
Interjección. Eufemismo. Usada para expresar extrañeza o enfado.
¡Carámbanos!
Aunque la RAE solo recoge las acepciones obvias, también ha sido usada frecuentemente para expresar sorpresa.
¡Carambolas!
Otro término para el que la RAE no recoge su uso como interjección. Usada para expresar sorpresa.
¡Caray!
Interjección. Eufemismo.Coloquial. Usada para expresar extrañeza o enfado.
¡Cáscaras!
Interjección. Coloquial. Denota sorpresa o admiración.
¡Cáspita!
Interjección. Usada para denotar extrañeza o admiración.
«¡Cáspitas! ¡Se ha tomado usted en serio su trabajo señor Sol!»
¡Chitón!
1.-Interjección.Coloquial. Usada para imponer silencio.
2.-Interjección.Coloquial. Usada a veces denotando ser necesario o conveniente guardar silencio para precaverse de un peligro.
¡Córcholis!
Interjección. Eufemismo. Caramba.
¡Diantre! ¡Diantres!
Interjección. Coloquial. Diablo. Diablos.
¡Eureka!
Interjección. Usada cuando se halla o descubre algo que se busca con afán.
¡Hurra!
Interjección. Usada para expresar alegría y satisfacción o excitar el entusiasmo.
¡Pardiez!
Interjección. Coloquial. Par Dios. Por Dios.
Durante varios siglos fue un término ampliamente utilizado como eufemismo por aquellos que querían realizar un juramento o exclamar algo en nombre de Dios sin necesidad de «blasfemar». Podemos encontrar el término «pardiez» en textos del Siglo de Oro español por autores como Cervantes, Lope de Vega o Quevedo pero también en numerosos libros y cómics de época moderna, tanto con su uso habitual como en contextos irónicos como en el caso de Mafalda.
Mafalda no necesita presentación…
¡Repámpanos!
Interjección. Indica sorpresa, enfado o disgusto.
(Gran Diccionario Larousse de la Lengua Española).
¡Troncho!
Guillermo Brown y su inseparable Jumble,
“¡Troncho, mi perro es mi perro”!
Guillermo Brown.
Expresión original de las novelas juveniles de Guillermo Brown de Richmal Crompton. Traduce, esencialmente, el término “crumbs!” aunque también se utiliza para otras expresiones. Indica, según los contextos, sorpresa, admiración, rechazo no muy tajante… Un coloquialismo más o menos consentido por los mayores aunque nuestro peculiar héroe procura no utilizarlo en presencia de personas adultas. Su origen se debe a López Hipkiss, primer traductor de los libros de la zaga que consiguió que el término siguiera siendo utilizado en traducciones posteriores hasta convertirlo indefectiblemente en seña de identidad de Guillermo y su pandilla de proscritos. (Estudios de Filología Inglesa. Homenaje a Jack White).
¡Recórcholis!
Interjección. Eufemismo. Córcholis.
¡Sapristi!
Exclamación del francés, proveniente de “Sacristi” (Sacré, Sacré Christ) deformado. Un eufemismo a mitad de camino entre el juramento y la interjección remilgada, que en nuestra infancia acostumbraban a pronunciar bastante los personajes de tebeo. Utilizada con asiduidad en “Mortadelo y Filemón”, “Anacleto, agente secreto”, “Capitán Trueno” o “Tintín” entre otros muchos.
Anacleto, agente secreto.
¡Zambomba!
Interjección. Coloquial. Usada para manifestar sorpresa.
Espero disfrutes recordando estos vocablos y, sobre todo, ¡recórcholis!, no olvides realizar tus propias aportaciones a través de tus comentarios.
Las obras recomendadas se caracterizan por su estilo ameno y accesible aunque no por ello falto de rigor o profundidad.
La ineludible necesidad de proteger el medioambiente y avanzar hacia el desarrollo de una sociedad fundamentada en parámetros de sostenibilidad es un objetivo escasamente cuestionado en la actualidad. Pocas son las voces que se atreven a poner en tela de juicio esta realidad palmaria y, cuando lo hacen, es esencialmente condicionados por intereses de carácter meramente económicos que poco o nada tienen que ver con el interés general de la población y nuestro entorno.
Aunque debe ser un objetivo común para toda la sociedad, sin duda el ámbito educativo juega un papel esencial en la extensión de los valores ecológicos que nos deberán permitir a corto plazo invertir el «descenso al infierno medioambiental» al que nos conduce inexorablemente la irresponsable actividad humana, especialmente a partir de la Era Industrial.
Existen infinidad de libros que abordan, con mayor o menor acierto y desde muy diferentes puntos de vista, el cambio climático, la sostenibilidad y, en general, el tema medioambiental. Entre ellos reseño brevemente cuatro obras que me parecen de notable interés por su carácter divulgativo y por considerar, además, que pueden ser de notable utilidad en el medio educativo.
Zero waste para salvar el mundo
Autora: Allly Vispo. Editorial: Vergara (2019)
Esta guía ilustrada ofrece una serie de consejos prácticos y claves para comenzar a vivir una vida sostenible. Lo hace a través del movimiento ‘Zero Waste’ o ‘cero residuos’ de consumo humano. Se trata de una filosofía de vida que busca reducir al máximo la cantidad de basura y residuos que genera el ser humano. Así, por ejemplo, propone cambiar los envases de plástico por otros reutilizables de cristal o sustituir los cosméticos líquidos por los sólidos. Está escrito por Ally Vispo, escritora, divulgadora y una de las mayores referentes de este movimiento en España.
Cambio climático
Varios autores. Editorial: Litera
Durante miles de años, el ser humano ha utilizado los recursos naturales para sobrevivir pero, desde la Revolución Industrial, algunos se han empezado a usar masivamente. Esto está en el origen del cambio climático pero, ¿Qué es exactamente? ¿Cómo se ha producido? ¿Cómo afecta a los bosques y los animales? ¿Y a las personas? Esta obra explica de forma detallada estos temas básicos relacionados con el calentamiento global e, incluso, expone algunos consejos para intentar combatirlo.
El libro de la ecología
Varios autores. Editorial: Akal (2019)
A lo largo de la historia el ser humano ha intentado ordenar el mundo vivo que le rodea y comprender cómo funciona. La evolución del ecosistema hace que sea más urgente responder a ciertas cuestiones como el por qué existe el agujero de ozono en la atmósfera o por qué es necesaria una mayor diversidad biológica. A través de vistosas infografías y explicaciones claras y sencillas, este libro intenta aportar luz y desenmarañar las claves que están detrás de diversas teorías científicas relacionadas con ellas.
Podemos salvar el mundo antes de cenar
Autor: Jonathan Safran. Editorial: Seix Barral (2019)
La mayoría de los libros que abordan la crisis medioambiental son densos, académicos y están repletos de estadísticas difíciles de interpretar. Este no es el caso. Se trata de una obra accesible que ofrece ideas y propuestas claras a los lectores que pueden poner en práctica inmediatamente incidiendo en la idea de que el principal porcentaje de las emisiones globales de CO2 proviene de las granjas industriales.
Las cuatro obras reseñadas se caracterizan por su estilo ameno y accesible aunque no por ello falto de rigor y profundidad por lo que las considero ideales para abordar el tema desde cualquier ámbito pero, muy especialmente, desde el educativo.
Y como siempre recuerdo en este tipo de post, este blog no recibe ningún tipo de recompensa por la recomendación de las obras señaladas más allá del mero placer (que no es poco) de ayudar a divulgar aquello que nos parece de interés.
Julián, Dick, Ana, Jorge y su inseparable Tim han crecido y se enfrentan a nuevas aventuras y retos como… ¡Convertir a la abuela en youtuber!
Y han vuelto de la mano de la EditorialQuercus, bajo la autoría de Bruno Vincent y con el beneplácito de los administradores del legado de Enid Blyton. En las nuevas aventuras de Los Cinco nos reencontramos nuevamente con Julián, Dick, Ana, Jorge/Jorgina y su, por lo que vemos, incorruptible Tim/Timoteo rondando ya la treintena y transportados al presente donde tendrán que afrontar, con renovado ánimo y convicción, nuevas y sugerentes aventuras tales como “Los Cinco renuncian a la bebida”, “Los Cinco dejan de comer gluten”, “Los Cinco en la isla del Brexit” o “Los Cinco preparan su cuerpo para la playa” entre otros épicos títulos que poco a poco van engrosando las nuevas correrías de nuestra querida pandilla de lecturas infantiles.
¡Carambolas! ¡Los Cinco nuevamente!
No fue para menos mi reacción cuando, casualmente, tropecé con este inesperado hallazgo mientras husmeaba en la sección de literatura extranjera de una conocida librería madrileña, como siempre hago cuando visito la capital. De hecho, tal fue mi impresión que compré de golpe los tres títulos disponibles en aquellos momentos al margen que, en estos tiempos en que mayormente he sustituido el libro en papel por el libro electrónico, sean casi las únicas obras editadas a la “vieja usanza” que sigo adquiriendo rigurosamente más que sea por el mero placer de verlos ordenados en mi estantería. Y es que, sin entrar en otras consideraciones, la serie cuenta con una atractiva encuadernación en tapa dura con ilustraciones de portada al estilo “clásico” pero con temática actualizada. Además, los libros recuperan y “encajan” oportunamente en sus páginas las ilustraciones originales de Jeanne Hives aunque, obviamente, en contextos en ocasiones chocantes.
¡Hurra! ¡Los Cinco trabajan en equipo!
Para hacernos una idea del tono de estas amables parodias baste señalar el argumento central de los títulos citados. Así por ejemplo en “Los Cinco abandonan la bebida” (“Five give up the booze”), nuestros héroes y heroínas infantiles se conjuran, bajo los efectos de una resaca monumental, para mantenerse sobrios durante todo un mes. Y es que en esta reelaboración del mito de Enid Blyton, los protagonistas beben, de forma más que habitual, algo más que cerveza de jengibre (traducido al español, por mor de la censura de la época, como “refresco de jengibre”). En “Los Cinco dejan de comer gluten” (“Five go gluten free”) la pandilla se ve forzada a renunciar a sus pantagruélicos y perniciosos “ágapes” y “piscolabis”, sustituyendo el pastel de riñones (traducido -ininteligiblemente- como “pastel de piñones”) y las galletas de jengibre por una dieta saludable después de sufrir una serie de molestos y dolorosos trastornos gástricos. Por su parte en “Los Cinco en la isla del Brexit” (“Five on Brexit island”) la siempre temperamental Jorge, firme europeísta, decide iniciar el proceso para declarar la independencia de la isla Kirrin en contraposición a la insistencia del petulante Julián por poner fin a la “tiranía de Bruselas”. A todo esto, Ana –muy en su papel- prefiere mantenerse en la equidistancia para contribuir a la buena armonía del grupo mientras que Dick, por decirlo brevemente, “pasa de todo”. Por su parte el perro Tim mantiene la neutralidad aunque quizás por su incapacidad para “entender la variedad de salchichas que existen en la Europa continental”. Finalmente, en “Los Cinco se preparan para la playa” (“Five get beach body ready”) la cuadrilla se esfuerza, siempre en equipo, por supuesto, por poner sus cuerpos a punto para las vacaciones de verano.
La serie, iniciada en 2016, cuenta ya con más títulos tales como “Los Cinco van a ser padres” (“Five Go Parenting’), “Los Cinco olvidan el Día de la Madre (“Five Forget Mother’s Day”) o los “Cinco enseñan Internet a la abuela” (Five get Gran Online), donde la abuela Barnard se convierte en una “youtuber” de éxito. La próxima publicación, “Los Cinco van a ninguna parte” (“Five go absolutely nowhere”) está prevista para junio de 2020.
¡Caray! ¡Qué recuerdos!
Para alguien cuyo tránsito de los cómics infantiles a los libros se produjo de la mano de “Los Cinco en peligro”, cuya lectura con 9 o 10 años tuvo en mi un impacto positivamente demoledor que me llevó a dedicar varios años, hucha rota tras hucha rota, a adquirir paulatinamente los 21 títulos de la serie publicados en España por la Editorial Juventud, el hallazgo de esta inesperada reinterpretación de mis ídolos infantiles ha supuesto todo un descubrimiento que me ha hecho reír y disfrutar nuevamente como un niño.
Especialmente desternillante me resultó la inesperada aparición en los libros de Bruno Vincent de “Los Siete Secretos”, convertidos ahora en odiosos competidores de nuestros protagonistas en las más diversas y disparatadas circunstancias. Pudiera equivocarme pero, tirando de memoria, no recuerdo que en las aventuras de Los Cinco se citaran a “Los Siete Secretos” que, por otro lado, nunca calaron ni de lejos tan hondo en mi imaginario infantil.
¡Chitón! ¡Dicen que Enid Blyton no era ninguna santa!
Y entramos, brevemente porque considero que puede ser materia, delicada, pero materia al fin y al cabo, para un post específico sobre el tema, en la consideración literaria e ideológica de Enid Blyton. Tampoco descubro nada nuevo si indico que la obra de la escritora anglosajona más querida por los propios británicos, por encima de la propia JK Rowling, según un sondeo de opinión encargado en 2008 por los prestigiosos premios “Costa Book Award”, ha sido considerada reiteradamente como esquemática, simplista, repetitiva y, en definitiva, falta de calidad literaria, trufada, además, de valores profundamente clasistas, sexistas y racistas, por no hablar de las acusaciones, entre otras, de adicción al alcohol de la buena de Blyton o, incluso, de sus coqueteos con el nazismo.
Lo anterior, como es lógico, no solo ha empañado notablemente el postrero prestigio de Enid Blyton sino que, incluso, la ha relegado a un lugar secundario, por ejemplo, en la BBC donde durante más de 30 años no tuvo ni una aparición. Para sintetizar la espesura del asunto, baste recordar que en 2018 la Real Casa de la Moneda Británica canceló la puesta en circulación de una moneda de 50 peniques conmemorativa del 50º aniversario del fallecimiento de la escritora (1897-1968) por, en parte al menos, las razones expuestas.
En 2015 la Editorial Juventud volvió a reeditar con significativo éxito los libros de Los Cinco en una versión renovada y, por tanto, desbrozada de expresiones y sesgos no aceptables en los tiempos actuales y como pareciera que la polémica siempre acompañe a la difunta autora, tampoco esto gustó en determinados círculos literarios que calificaron, sintetizando, como una “impertinencia” el modificar el trabajo de un autor/a sin su permiso añadiendo, además, que “toda obra debe ser leída en el contexto de la época”.
Lo que está claro y aquí lo dejamos puesto que tiempo tendremos de ahondar en la cuestión, es que Enid Blyton, nacida en el S. XIX y fallecida bastantes años antes de que yo mismo descubriera sus libros (el primero de la serie, “Los Cinco y el tesoro de la isla”, data de 1942), es producto de su tiempo –como cualquier autor/a- lo que hace muy complejo interpretar su obra con parámetros actuales.
¡Caramba! ¿Para cuándo en español?
Aunque de momento la serie solo se ha publicado en inglés, no sería de extrañar que dado el formidable éxito que cosecharon las aventuras de Los Cinco en España, especialmente durante los 70 y 80, en breve y esperemos que así sea, podamos encontrar su publicación en español más que sea a través de alguno de los pasadizos o caminos secretos que tanto abundaban como ideal solución en las muchas aventuras en las que Julián, Dick, Ana, Jorge y Tim se vieron inmersos.
Mi experiencia personal con esta herramienta ha sido más que satisfactoria puesto que sin especiales conocimientos en edición de vídeos he podido crear llamativas presentaciones.
Todos sabemos que los vídeos son un magnífico medio para transmitir tus ideas y mensajes de una forma amena e impactante. Existen muchas herramientas para ello de lo cual algo ya hemos hablado en este blog al referirnos, por ejemplo, a KineMaster, una práctica aplicación para crear y editar vídeos fácilmente desde tu móvil.
Sin embargo, en esta ocasión nos vamos a centrar en una herramienta específica para crear vídeos animados impactantes sobre pizarra blanca (también conocidos como «whiteboard animation») y, por tanto, con gran potencial de “llegada” a nuestros destinatarios finales. Estamos hablando de la aplicación VideoScribe, creada por Sparkol.
Sin duda VideoScribe es una opción más que recomendable para su uso en entornos educativos pero también resulta ideal para exponer cualquier tema a través de una presentación dinámica y fresca, alejada de los tradicionales “PowerPoint”.
La característica sin duda más reseñable y distintiva de esta herramienta es la utilización de la “mano que escribe”. Puedes elegir entre decenas de manos o instrumentos de escritura (o gomas de borrar, según sea el caso), simulando tanto su uso por “diestros” como por “zurdos”. También existe la opción de usar la mano en distintos desplazamientos o para introducir diferentes elementos además de, por supuesto, crear tus propias “manos” personalizadas.
VideoScribe te ofrece una amplia variedad de «manos» para tus presentaciones.
Los elementos añadidos a tu proyecto se insertan en una línea del tiempo que te permitirá editar las características de cada uno de ellos para darle coherencia y dinamismo a tu presentación. Para cada uno podrás decidir el tiempo que tarda en “escribirse”, el tiempo de pausa y el tiempo de transición hacia el siguiente elemento. También podrás jugar con el enfoque de la cámara entre otras posibilidades.
La herramienta te permite insertar todo tipo de elementos gráficos de su amplia galería (más que suficiente para cualquier proyecto) aunque siempre tendrás la posibilidad de adquirir nuevas imágenes a través de la aplicación. Por supuesto, también podrás insertar tus propias imágenes desde tu ordenador. La versión de pago te permitirá, además, sustituir la siempre molesta “marca de agua” de VideoScribe por la tuya propia para personalizar tu presentación.
Obviamente, también podrás incluir música a tu proyecto dado que incluye más de 200 temas de uso libre además de poder grabar tu propio audio (sumamente interesante para la creación de material educativo) o insertar cualquier tema en MP3 si así lo deseas o lo requiere tu proyecto.
Aunque es característico su fondo de “pizarra blanca” también podrás editar el mismo y escoger entre diferentes colores y texturas.
Una características interesante es la de “zoom al final de la presentación” con la que conseguirás que la cámara se “aleje” hasta mostrar todo los elementos del proyecto. Cuando conozcas a fondo la herramienta, podrás intentar ir combinando la posición de los elementos que vayas incluyendo en la presentación para conseguir con todos ellos una forma o mensaje determinado de tal forma que al final de la misma, utilizando esta opción, la cámara te muestre el mismo construido con los propios elementos individuales de la presentación. Llegar a este nivel requiere obviamente un manejo más avanzado de la aplicación pero, desde luego, el efecto final será sumamente impactante.
Una vez terminado tu proyecto tendrás varias opciones para compartirlo directamente desde VideoScribe por ejemplo en YouTube, Vimeo o descargarlo como PowerPoint. También podrás descargarlo en tu ordenador para compartirlo o enviarlo o, como en el ejemplo que ilustra este post, “rematarlo” con alguna otra aplicación de edición de vídeos. La descarga la podrás hacer en diferentes formatos (WMA, MOV, AVI y secuencia de imágenes en JPG o PNG), todo ello en diferentes calidades (360 Web/teléfono, 640 normal, 720 HD estándar y 1080 Full HD) pudiendo escoger el número de frames por segundo. Una vez descargado tu proyecto, podrás convertirlo a tu formato preferido (en mi caso MP4) con cualquier servicio online, por ejemplo, sin pérdida de calidad del vídeo.
VideoScribe cuenta con una versión gratuita y otra de pago. La versión gratuita te permitirá utilizar la herramienta durante 7 días para realizar las pruebas o crear los vídeos que desees. La versión de pago, en el momento de escribir este post, supone 25 € mensuales, precio que se reduce a 13 € mensuales si optas por una suscripción anual.
Mi experiencia personal con VideoScribe ha sido más que satisfactoria puesto que sin especiales conocimientos en edición de vídeos he podido crear llamativas presentaciones con facilidad dado que la curva de aprendizaje de la aplicación es más que aceptable.
A modo de ejemplo, aquí te dejo la última presentación que he realizado para una campaña lanzada por la organización con la que colaboro actualmente. En este caso, una vez terminada la presentación con VideoScribe, remate la misma con Kinemaster para la cabecera y el cierre.
Por supuesto, existen otras opciones para la creación de presentaciones sobre “pizarra blanca”. Una de las más conocidas (o al menos de las “más publicitadas”) es por ejemplo Doodlycuyo precio, sin embargo, es bastante más elevado.
Y para finalizar, como siempre indico en este tipo de posts, aclarar que este blog no recibe ningún tipo de recompensa ni remuneración por la promoción de esta aplicación ni ninguna otra. Simplemente es una modesta aportación que espero te ayude en la tarea de crear presentaciones impactantes de calidad.
Gracias a la amplia galería de recursos y opciones que ofrece KineMaster podrás crear y editar vídeos de calidad con una curva de aprendizaje más que aceptable.
Aplicaciones para la creación y edición de vídeos hay muchas pero no todas son sencillas de utilizar para personas no muy versadas en diseño audiovisual como es el caso del que suscribe. Bien sea por razones laborales o por mero ocio, en múltiples ocasiones me he tenido que enfrentar a la tarea de crear o editar vídeos de todo tipo lo cual, si no dispones de los conocimientos y herramientas adecuadas, puede convertirse en un verdadero quebradero de cabeza para conseguir un resultado óptimo.
En este sentido y desde hace ya bastante tiempo mi aplicación preferida para estas labores es KineMaster, una App disponible para Android e IOs que te permite crear con notable facilidad vídeos de respetable calidad en tu dispositivo móvil, bien sea un teléfono inteligente o una tableta. Por supuesto, si eres más de “teclado y ratón” puedes intentar utilizar esta magnífica aplicación en tu PC a través de cualquier emulador como puede ser BlueStack, servicio al cual ya le dedicamos un post en este mismo blog.
KineMaster es un editor de vídeo muy completo, con muchísimas posibilidades de personalización a través de imágenes, audios, inserción de vídeos, filtros, retoque de brillo, contraste, saturación, transiciones, marca de agua, títulos, tema, etc. Su manejo es bastante intuitivo por lo que, a poco que experimentes y uses tu imaginación, podrás obtener resultados verdaderamente sorprendentes.
La aplicación la puedes utilizar en su versión gratuita con, obviamente, limitación de funciones. La versión “Premium” a la que puedes acceder mediante suscripción mensual te permitirá, entre otras opciones:
Acceder a los recursos Premium.
Eliminar la tan molesta “marca de agua”.
Eliminar la publicidad de la App (Android).
Acceder a soporte técnico prioritario.
Es interesante señalar que frente a otras aplicaciones de elevado precio, suscribirse a la modalidad Premium de KineMaster tiene un coste relativamente modesto que oscila entre los 4 y los 6 euros mensuales (en el momento de la edición de este post 4,19 €). Aunque también puedes realizar proyectos interesantes con la versión gratuita, la opción Premium, en mi opinión, es recomendable dado que te abrirá muchas posibilidades especialmente por el acceso a su amplia galería de recursos de todo tipo además de, por supuesto, eliminar la siempre molesta “marca de agua” que no querrás que aparezca en tu flamante proyecto. Por otro lado y al tratarse de suscripciones mensuales de las que puedes prescindir en cualquier momento, siempre tienes la posibilidad de hacerte Premium solo por un mes cuando realmente lo necesites para desarrollar el proyecto o los proyectos que tengas en mente.
Como paso previo a la creación de tu vídeo, te recomiendo que crees una carpeta en la galería de tu dispositivo con todas las fotos y vídeos que tengas pensado utilizar en el mismo puesto que ello te facilitará notablemente la tarea a la hora de montar tu audiovisual.
No es el objeto de este post desarrollar un tutorial detallado sobre el uso de KineMaster puesto que algunos muy buenos ya existen en Internet y porque siempre he sido de la opinión que la mejor forma de aprender a utilizar una aplicación es “trasteando” con la misma y buscando puntualmente aquello que realmente te interese.
En todo caso, aquí te dejo el enlace al manual de usuario (inglés) así como al canal de YouTube de la App donde encontrarás muchas explicaciones y “tips” para facilitarte la curva de aprendizaje.
Como muestra de las posibilidades y reconociendo que es manifiestamente mejorable, te muestro el último vídeo que he creado con KineMaster para la organización en la cual participo actualmente.
Y, por si hubiera alguna duda al respecto, aclarar que este blog no recibe ningún tipo de recompensa ni remuneración por la promoción de esta Aplicación ni ninguna otra. Simplemente es una modesta aportación que espero te ayude en la siempre compleja tarea de crear y editar vídeos de calidad.
Una amplia colección con más de 100 recursos educativos, culturales y de ocio online para el profesorado y las familias.
Actualmente existen infinidad de recursos online para facilitar la tarea del profesorado así como para ayudar a las familias y alumnado a mejorar sus conocimientos. La enseñanza y el aprendizaje online, siempre presente desde los inicio de Internet, ha cobrado un impulso inusitado durante el actual periodo de Alerta Sanitaria y confinamiento vivido en nuestro país con motivo de la pandemia del COVID-19 iniciada en marzo de 2020.
Existiendo muchísimo donde escoger, el problema fundamental para muchos docentes y familias reside en la tarea de seleccionar adecuadamente los recursos más indicados para cada tema y nivel educativo. Es por ello por lo que te proponemos una amplia e interesante compilación de recursos educativos online reunida por Stec.es y en cuya elaboración y mantenimiento participo activamente. En la misma podrás también encontrar mi propio Blog de Aula Jiribillas.com, con multitud de actividades para Educación Primaria.
RECOPILACIÓN DE RECURSOS EDUCATIVOS, CULTURALES Y DE OCIO
EDUCTIFY: Este estudio tiene varias apps muy interesantes,en todas ellas podemos elegir un plan de estudios. En español hay de matemáticas, inglés y ortografía.
BMATH: Una app para repasar matemáticas de 1º a 4º, muy gamificada y preparada para que a los 20 minutos los niños paren, ya que los bmathis se van a dormir.
AULA ITBOOK OPERACIONES MATEMÁTICAS: Sesenta niveles de dificultad, un montón de cálculos matemáticos básicos, repartidos en 10 escenarios.
AULA ITBOOK MY LIFE IN ENGLISH: Recomendada para edades de 8 a 14 años, con un nivel de inglés, A1, A2. A base de sopas de letras, crucigramas, el ahorcado y muchos juegos más.
KHAN ACADEMY: Parte de una organización sin ánimo de lucro con la misión de ofrecer educación gratuita de calidad para todos, en cualquier lugar del mundo, apoyándose en profesionales de la educación, nos ofrecen dos apps, una para los más pequeños y otra para mayores donde encontramos cientos y cientos de actividades, videos, juegos interactivos, etc. Muy muy completas.
(Recursos transversales: Arte en la escuela, Canarias, Convivencia y Mediación, Diversidad e Identidad Sexual, Educación Emocional, Educación para la Salud, Educación Víal, Igualdad Género, Medio Ambiente, Pacifismo, Solidaridad y Regugiados, TIC en aula, Otros Recursos).
Portales y Recursos Online educativos diversos
LIVEWORKSHEETS (Banco de fichas interactiva con posibilidad de crear nuevas).
Urge debatir colectivamente y buscar alternativas en todos los ámbitos para evitar que sean los sectores sociales más desfavorecidos los que paguen la factura de la inevitable crisis que se avecina.
Fernando Pellicer Melo
La actual situación de suspensión de la actividad educativa presencial ha traído a la palestra el término “brecha digital” para señalar la desigualdad existente entre la ciudadanía respecto a su acceso a las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación). Según cálculos de Oxfam Intermon, 4.000 millones de personas en el mundo viven sin acceso a la red lo cual, en la era de la conectividad, condiciona notablemente sus posibilidades de progreso socioeconómico y cultural.
Además del acceso a la red propiamente, la brecha tecnológica también se manifiesta en la falta de “habilidades digitales” en gran parte de la población, casi imprescindibles en la actualidad para relacionarse con las administraciones, para el acceso a servicios y recursos culturales y educativos de todo tipo y, por extensión, para lograr una mejora de la cualificación laboral o, sin ir tan lejos, para algo tan doméstico como consultar la factura de la electricidad.
Sin menoscabo de los problemas de “conectividad”, se destaca la falta de “habilidades digitales”, según informes del Instituto Canario de Estadística (Istac), como el principal déficit que encontramos en nuestro archipiélago en este ámbito y que, de forma palpable, se está poniendo de manifiesto en el terreno educativo una vez ha entrado en juego la obligada y urgente necesidad de desarrollar alternativas formativas online. Actividad online, dicho sea de paso, que se está desarrollando gracias fundamentalmente a que el profesorado ha puesto desinteresadamente sus recursos personales de acceso a la red y dispositivos al servicio de su actividad laboral y, por tanto, del bien común, como no cabría esperar otra cosa en la actual situación.
Podríamos reforzar el análisis matizando, y esto lo afirmo yo, que una cosa es que una buena parte de los hogares canarios dispongan de acceso a la red y diversos equipamientos tecnológicos como televisiones, videoconsolas o móviles, más o menos de última generación, y otra muy diferente es que, además, se disponga de un ordenador o tableta en condiciones y, lo que es aún más complejo, de las habilidades necesarias para utilizar los mismos para actividades que vayan más allá del mero ocio. En este contexto, no podemos menos que considerar que la brecha tecnológica no es más que una expresión de la desigualdad y la pobreza en la sociedad de la era digital.
Nada de esto nos debe sorprender a poco que hagamos un mínimo ejercicio de contextualización. Así por ejemplo y sin ánimo de ser exhaustivos, según el IX Informe “El Estado de la Pobreza” elaborado y presentado en octubre de 2019 por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en Canarias (EAPN-Canarias), el 36% de la población del archipiélago está en riesgo de pobreza y exclusión social mientras que la Tasa de Pobreza Severa en Canarias se sitúa en el 9,2% señalando, además, un incremento de 40.000 personas en riesgo de exclusión social respecto a informes anteriores. En palabras de la propia Viceconsejera de Derechos Sociales del Gobierno de Canarias y pese a la mejoría en algunos parámetros, “los datos de este informe ponen de manifiesto la cronificación de la pobreza en nuestra región (…) por lo que requiere de políticas concretas y realistas». Si a lo anterior le sumamos, por solo aportar un dato más, una tasa cercana al 19 % de desempleados declarados, de las más elevadas del Estado, según la última Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al último trimestre de 2019, creo resulta sencillo hacerse una idea del actual estado de la cuestión en nuestro archipiélago.
Los datos apuntados se refieren al periodo previo a la alerta sanitaria originada por el COVID-19 por lo que no contemplan, obviamente, las gravísimas consecuencias que sobre la actividad productiva está ya teniendo la actual situación, en un territorio como el nuestro, supeditado al binomio económico del turismo y los servicios. Aunque tiempo habrá, desgraciadamente, para comprobarlo, algunas proyecciones indican que el desempleo en Canarias podría alcanzar cotas inéditas, superiores al 40%, como consecuencia del desastre económico que se avecina.
Ante este amargo panorama, la anunciada distribución de 10.000 tabletas con conectividad a Internet, sufragadas por la Consejería de Educación y, en menor proporción, por el Ministerio de Educación y por muy loable y necesaria que sea la iniciativa, solo viene a suponer un parche ante la profunda hemorragia de desigualdad social que sufrimos en el archipiélago. Aún estando más que justificada la iniciativa, es evidente que no solucionará el problema de fondo, además de porque solo alcanzará una porción relativamente pequeña de los hogares canarios con necesidades al respecto porque, a la luz de lo expuesto, no afronta el problema esencial desde su raíz. Solo será posible, como decíamos apuntaba la propia Viceconsejera de Derechos Sociales, avanzar en la lucha contra la desigualdad social con “políticas concretas y realistas” que, añado, aborden el problema globalmente y desde su origen. En todo caso “andando se hace camino”.
Sería demagógico afirmar que los gobiernos actuales, centrales o autonómicos, tengan la exclusiva responsabilidad de esta situación pero no resultaría tan desacertado sostener que la gestión de los progresivos gobiernos en materia social y económica durante las últimas décadas no ha estado orientada a compensar las desigualdades sociales como objetivo prioritario. Por solo dar una muestra, las más de 20.000 solicitudes de ayuda a la dependencia paralizadas en algún despacho del Gobierno de Canarias -según datos del Imserso y la propia Administración-, la casi inexistente política de ayudas a la vivienda, los recortes y privatizaciones en materia sanitaria y la escasa inversión en el ámbito educativo, incumpliéndose sistemáticamente la Ley Canaria de Educación, por no hablar de la nula visión respecto a la urgente necesidad de diversificación de la economía canaria, dan buena cuenta de ello.
En definitiva, es necesario que los gobiernos hagan suyo, realmente y no solo como mantra publicitario, el lema tan en auge “De esta salimos juntos” y se apliquen denodadamente para afrontar la crisis socioeconómica que se avecina y cuyos efectos ya estamos comenzando a notar, desde una perspectiva eminentemente social para no repetir experiencias de anteriores crisis donde los recortes se cebaron, dramáticamente y casi de forma exclusiva, en la población más vulnerable socialmente.
Todos tenemos algún viejo móvil cogiendo polvo en algún cajón. ¿Porqué no sacarle provecho y darle una nueva oportunidad?
Los teléfonos inteligentes son dispositivos que acaparan en su interior una enorme tecnología, incluso, por supuesto, aquellos que ya has desechado por obsoletos o por algún problema puntual que no compromete enteramente el funcionamiento del móvil. Dado que es más que probable que almacenes alguno olvidado en algún cajón y a poco que te guste reutilizar las cosas, cuestión más que recomendable desde el punto de vista de la sostenibilidad, debes saber que siempre hay posibilidad de sacarle provecho y darle una segunda oportunidad con variadas opciones de uso. Ideas al respecto encontrarás en abundancia en Internet: reproductor multimedia, marco de fotos, consola retro, GPS para el coche, cámara de vigilancia y así, infinidad más.
Precisamente, en esta última posibilidad de reutilización, la de cámara de vigilancia, nos vamos a detener en esta entrada. Con una simple búsqueda en la red podrás encontrar información sobre distintas opciones y aplicaciones para conseguir el objetivo, tanto dentro de tu red doméstica como para utilizarla fuera de la misma (obviamente, lo más interesante y también bastante más complejo). Sin embargo, en este post nos vamos a centrar en una de las alternativas más sencillas actualmente existentes para conseguir la finalidad deseada. Nos referimos a la App gratuita App eWeLink Camera. Por si lo desconocías, eWeLink es la App utilizada para gestionar los dispositivos de la marca SONOFF que ahora incluye la posibilidad de incorporar, mediante la App eWeLink Camera, nuestro antiguo móvil reconvertido en cámara de vigilancia, como un dispositivo más, de forma, además, gratuita y sencilla.
La configuración no ofrece ninguna dificultad. Solo es necesario descargarse la aplicación eWeLink Camera en el móvil que pretendamos reciclar y disponer de la aplicación eWeLink original en nuestro propio móvil. Es importante tener en cuenta que no debes instalar ambas aplicaciones en el mismo dispositivo puesto que entrarían en conflicto. Una vez instaladas, es necesario identificarte en ambas con la misma cuenta eWeLink para que, a continuación, puedas detectar el «nuevo dispositivo» desde tu móvil habitual. Una vez realizadas estas sencillas operaciones, tu nueva cámara de seguridad será accesible, junto con el resto de dispositivos que tengas configurados, en tu App eWeLink aún cuando ambos móviles no se encuentren en la misma red aunque, obviamente, ambos deberán contar con conexión a Internet del tipo que sea.
Si el móvil utilizado ahora como cámara de seguridad no va a ser empleado para ninguna otra función y aunque no es imprescindible, no estaría de más realizarle una limpieza reseteándolo a los datos de fábrica mediante la opción que deberás encontrar para ello en los ajustes del dispositivo. Si no fuera así, siempre tienes la posibilidad de realizar un «Factory Reset» desde el modo «Recovery» de tu teléfono. Lo normal, para los teléfonos Android, es que puedas activar el «Recovery Mode», con el teléfono apagado, manteniendo presionados el botón para bajar el volumen y el botón de encendido al mismo tiempo, hasta que el dispositivo se encienda. En Internet encontrarás mucha información al respecto así como las combinaciones de teclas adecuadas para tu dispositivo si no te funcionara con la «estandar» que te indico.
Lógicamente, es importante que el móvil que vayas a utilizar como cámara y donde, por tanto, tendrás instalado eWeLink Camera, esté permanentemente conectado a la red eléctrica para evitar acabar en unas pocas horas con la batería. En el mismo tendrás la opción de «congelar» (freeze) la pantalla para que la cámara siempre se mantenga en primer plano sin que ninguna otra App la pueda ocultar.
Por su parte, en cuando accedas a tu nueva cámara en eWeLink, desde el teléfono desde el cual pretendas visualizarla, dispondrás de la opción de mandar mensajes de voz, para lo cual solo tendrás que activar el micrófono y, por supuesto, de escuchar el sonido ambiente que esté recogiendo la aplicación en tu viejo móvil. Es decir, además de cámara, tendrás un «intercomunicador» entre ambos móviles pero, eso sí, solo accesible desde el móvil desde el cual visualices tu cámara remota. Tu nueva cámara se activará automáticamente cada vez que accedas a la misma desde la aplicación eWeLink. Mientras no sea así, mostrará una pantalla en negro con un simple mensaje de «No connection». Finalmente, recuerda que como ya hemos explicado en un anterior post, si quieres visualizar tu nueva cámara desde un PC, deberás instalar un emulador de Android en el mismo.
Es evidente que con eWeLink Camera no vas a obtener las prestaciones avanzadas que puede ofrecer una cámara de vigilancia profesional pero, dado su carácter gratuito, su facilidad de configuración y manejo así como la posibilidad que te ofrece de reciclar tu viejo móvil, sin duda es una opción sumamente interesante para tu hogar, trabajo o, simplemente, vigilar tu mascota.
Recicla tu viejo móvil y contribuye a la sostenibilidad del Planeta
La vida, prácticamente inerte a píe de calle, se ha ido trasladando progresivamente a las alturas de los edificios donde mis convecinos han ido creando pequeños remansos de tranquilidad.
Fernando Pellicer Melo
Y cuando digo “alturas” me refiero a algo tan poco idílico como la azotea de mi casa. Un espacio habitualmente reservado para menesteres prosaicos y para acumular trastos en los correspondientes cuartos y que, por mor del Coronavirus y el obligado enclaustramiento generalizado, se ha convertido en territorio de asueto colectivo para los vecinos (con estrictos turnos y distancias de seguridad, por supuesto). Cuartos que, envueltos en polvo y abandonados a su suerte, han mutado casi por arte de magia, por ejemplo, en coqueto estudio de pintura. Pintura pausada, quizás por el carácter de la aprendiz de pintora, quizás por solo disponer de un lienzo que se pretende alargar hasta el fin del confinamiento.
Es curioso cómo cambia la perspectiva de las cosas y de los espacios en situaciones límite. Una zona casi olvidada y hasta en ocasiones despreciada, un lugar accesible pero apenas transitado, repentinamente se ha convertido en una especie de “chill out” de última tendencia al que acudimos para refrescarnos, en el amplio sentido de la palabra.
No fue así siempre. La azotea de mi casa me despierta recuerdos infantiles imborrables. Recuerdos de juegos inocentes, escondites secretos y objetos misteriosos, mascotas venidas a menos, manualidades nunca acabadas y, por qué no decirlo, con el transcurso de los años, animosas actividades propias de cualquier adolescente.
Desde las alturas de mi edificio, un edificio cualquiera, vulgar y sin mayor personalidad, diviso los tejados y azoteas colindantes, algún refrescante ático y, con el tranquilizador anonimato que siempre ofrece “mirar desde arriba”, algunas fascinantes ventanas del vecindario.
Es fácil comprobar cómo la mayoría de las terrazas que alcanzo a observar han ido sufriendo una paulatina transformación con el transcurso de los días. Primero fue alguna tímida y desvencijada hamaca, en uno de los edificios más lejanos. Después le sucedieron, sin prisa pero sin pausa y de forma generalizada, algunas sombrillas, mesas, sillas, toldos, extraños e incomprensibles aparatos de gimnasia y hasta alguna barbacoa fugaz desempolvada de lo más hondo de algún trastero.
La vida, prácticamente inerte a píe de calle, se ha ido trasladando progresivamente a las alturas de los edificios donde mis convecinos han ido creando pequeños remansos de tranquilidad. Aire y luz necesarios para sobrellevar, de la mejor manera posible, la tristeza del encierro.
Constato la determinación y convicción con que algunas vecinas, especialmente, se entregan al más intenso de los ejercicios físicos o a mí al menos me lo parece. Bien sea haciendo “largos” en interminables idas y vueltas en el balcón, bien sea trotando en círculos en sus terrazas. Gente que tal vez no puede vivir sin ejercitarse o, quizás, aprovechan las circunstancias para ajustar cuentas con eternas autopromesas incumplidas.
No muy lejos, a la altura de la calle Mayor, una señora de contenida edad y exigua azotea y a la que conozco de cruzar cordiales saludos desde tiempo inmemorial, se las ha ingeniado para saltar diariamente a la azotea del edificio colindante, mucho más amplia y espaciosa. Un edificio comercial cerrado a cal y canto como todos. Con evidente satisfacción por disponer de tal extensión para ella sola y quizás también embargada por la excitante sensación de su pequeña pero exitosa triquiñuela, trota diariamente con manifiesto deleite, por encima de miles de artículos de última tecnología que esperan mejores tiempos para volver a ser objeto de deseo de presuntos compradores.
Otros, los menos, se esmeran como nunca en cuidar las macetas y pequeños jardines de sus ventanas y terrazas. Pareciera más que una afición, una verdadera reivindicación de lo verdadero y lo sencillo como contraposición a la complejidad de los tiempos que vivimos.
Le he puesto rostro, incluso en contados casos nombre, a muchos de mis convecinos. Rostros hasta ahora anónimos que cobran sentido cuando nos cruzamos miradas cómplices, de amparo. Sonrisas veladas y miradas fugaces intercambiadas a lo largo del día, del interminable día. Cuando la apremiante necesidad de consuelo se diluya, ¿volveremos a la rutina del saludo cortes y huidizo? El mañana está por descubrir.
Observar las aves urbanas se ha convertido en una inesperada afición. Ante la atropellada retirada de los humanos a sus respectivas guaridas, la fauna alada gana espacio con decisión. Irredentas palomas, foráneas tórtolas, resucitados gorriones y hasta algún receloso mirlo me acompañan en mi primera visita matutina a nuestro discreto paraíso terrenal. A veces, cuando el sueño se rebela, antes de amanecer, me acomodo a la espera de que las cotorras del parque levanten ruidosas su atropellado vuelo. Me sobrevuelan todas las mañanas en desigual formación y pequeños grupos, sin mayor orden ni concierto, marcando las distancias como si con ellas también fueran las nuevas normas de “distanciamiento social” que estamos a punto de asumir como cotidianas en el futuro. Y los vencejos, siempre haciendo imposibles cabriolas mientras, según parece, se alimentan de desprevenidos insectos. Dicen que los vencejos pueden dormir mientras vuelan. Surcan el aíre permanentemente y solo aterrizan para poner sus huevos y criar sus polluelos. ¡Volar durmiendo o dormir volando! El sueño eterno de cualquiera.
En la calle, el vacio se ha apoderado de todo el espacio. Solo algún transeúnte fugaz, bolsa en mano, y algunos perros arrastrando a sus dueños mientras intentan entender, con orejas gachas y mirada extraviada, qué demonios está pasando. Quizás deban subirlos a las alturas, donde la vida, pese a todo, continúa.
BlueStacks te permitirá acceder desde tu PC a tus aplicaciones Android preferidas de forma sencilla e intuitiva.
Ya sea por trabajo, ocio o simplemente para disfrutar de tus juegos Android preferidos desde tu PC, es posible que en más de una ocasión te hayas planteado utilizar alguna de las Apps Android de tu móvil en tu ordenador personal. Si te has visto en esta situación, estás de suerte porque, como en la mayoría de las ocasiones cuando hablamos de tecnología, ello es posible sin grandes quebraderos de cabeza.
Existen diversas alternativas y una de ellas, quizás de las más recomendables, es la utilización de un emulador de Android. Como su propio nombre indica, este tipo de programas te permitirán “emular” el sistema operativo Android en tu PC y, por tanto, utilizar de forma totalmente funcional casi cualquier App existente en Google Play.
Entre los diferentes emuladores que puedes encontrar, BlueStacks es uno de los más utilizados y, en mi opinión, de los más completos y versátiles, además de contar con versiones para Windows y macOS. Si utilizas Linux, de momento la cuestión está algo más complicada aunque existan algunas alternativas como GenyMotion.
Una vez instalado y configurado BlueStacks, lo cual no supone mayor problema, sería como tener un móvil o tablet virtual en tu ordenador, pudiendo descargar y utilizar tus aplicaciones y juegos Android favoritos. Al acceder, podrás comprobar que es un emulador orientado, especialmente a partir de su última versión, hacia los juegos, lo que hace que triunfe en el mundo “Gamer”, pero eso no significa que no puedas utilizar, de forma totalmente funcional, cualquier otra App del Market de Google.
Para que te hagas una idea de sus posibilidades, más allá de ser una potente plataforma de juegos, en mi caso la utilizo para acceder cómodamente desde mi portátil a aplicaciones tales como Xiaomi Home, para visualizar diferentes cámaras de seguridad, 1Password o eWeLink. Precisamente, una de las grandes ventajas de este emulador es que en su instalación inicial ya trae Google Play incorporado de “serie” lo que facilita enormemente la descarga de cualquier App que desees. Una vez instalado BlueStacks, encontrarás un escritorio bastante intuitivo cuyo funcionamiento será bastante similar al de tu móvil o tablet, es decir, sin especiales complicaciones añadidas y contando con que, evidentemente, podrás utilizar el teclado y el ratón sin ningún impedimento. Además, para los juegos, también ofrece posibilidades de emular mandos para controlar los mismos entre otra amplia variedad de posibilidades.
Señalar que aunque he tenido la oportunidad de leer algunos comentarios negativos respecto a actualizar BlueStacks de su versión 3 a la 4, e incluso recomendaciones de no descargarse esta última, en mi caso no he tenido problemas al respecto, ni con la versión 4 ni con todas las actualizaciones posteriores que he ido instalando.
Los requisitos mínimos de BlueStacks no son muy elevados aunque, por supuesto, mientras más potente sea tu ordenador, mejor rendimiento obtendrás en todas las aplicaciones y juegos que pretendas utilizar. En todo caso, si tu computadora ya está próxima a la jubilación, no estaría de más que le echaras un ojo a los “Consejos para acelerar BlueStacks” que se ofrecen desde su soporte.
En definitiva, una gran solución, útil y sencilla, sin deseas acceder fácilmente a tus aplicaciones Android preferidas desde tu PC.
Si George Orwell levantara la cabeza, probablemente nos miraría fijamente y nos diría… “¡Te lo avisé!”
Fernando Pellicer Melo
En plena alerta sanitaria por el COVID-19 y con la ciudadanía confinada en sus casas, Google nos ha vuelto a recordar su permanente “omnipresencia” publicando detallados informes estadísticos en los que se analiza como las medidas decretadas por las autoridades sanitarias están afectando a la movilidad de la población en hasta 131 países. Algo ya conocido y accesible de forma individual a través de Google Maps pero que ahora, puesto en su conjunto y accesible públicamente, ofrece una idea de la ingente cantidad de información que Google maneja sobre nuestras vidas.
Así por ejemplo, en el conjunto del Estado español y durante el periodo de confinamiento, el movimiento hacia lugares de recreación y tiendas ha bajado un 94%, el uso del transporte público un 88%, la asistencia a lugares de ocio un 85%, las compras un 76% y los viajes al trabajo un 64%, mientras que en lugares residenciales la movilidad crece un 22%.
Según Google, para elaborar estos informes se sirve de datos “anónimos” obtenidos a través de la geolocalización de los teléfonos móviles sin conocimiento, presuntamente, de la identidad de cada usuario.
Los documentos, accesibles públicamente, se pueden encontrar en su nuevo servicio COVID-19 Community Mobility Reports donde se detalla la movilidad de la ciudadanía por países y, en el caso de España, también por Comunidades Autónomas.
Los portavoces de Google no dudan en señalar la bondad de sus actuaciones «La idea es ayudar a los responsables de salud pública y otras administraciones a entender mejor cuáles están siendo los efectos de las medidas adoptadas y, si es necesario, modificarlas en base a las tendencias observadas«, según ha explicado un portavoz de la compañía subsidiaria de la multinacional Alphabet Inc.
Con todo ello, Google nos vuelve a recordar que, a poco que se lo permitamos, puede conocer mucho más de lo que pensamos sobre nosotros mismos, incluido –como es el caso- cuáles son nuestros movimientos habituales todo ello gracias a la inseparable simbiosis existente entre persona y móvil propia de nuestros actuales tiempos.
Obviamente, la compañía afirma tajantemente que en este ingente proceso de recogida y análisis de datos, se siguen «los más estrictos protocolos y políticas deprivacidad«incluyendo el no ofrecer cifras absolutas de movimiento sino solo cifras porcentuales.
Los informes se generan a partir de los datos de geolocalizaciónque los dispositivos móviles ofrecen a Google, esto es, a través del GPS de los teléfonos que hayan dado permiso expreso para ello, tal como hacen ya muchísimas otras Apps probablemente instaladas en tu móvil.
La cuestión, una más dentro del gran debate abierto sobre la privacidad y nuevas tecnologías, obviamente da para mucho pero lo que esencialmente nos interesa a efectos de este post es conocer como desactivar la posibilidad de que las App de Google o cualquier otra puedan recopilar datos sobre tus movimientos, si es que ello realmente te preocupa.
En este sentido, hace no mucho tiempo, accedí desde mi cuenta Google a la función de “Cronología de ubicaciones” de Google Maps y me quedé realmente “impactado” por la enorme cantidad de información recabada por Google sobre mis ubicaciones pasadas. Prácticamente podía revisar, con mapita ilustrativo incluido, mis movimientos y localizaciones de cualquier día de los últimos años. Realmente asombroso. En ese mismo momento opté, no solo por desactivar la posibilidad de que Google almacenara esos datos personales sino que, además, borré todo el historial existente.
Si la cuestión te preocupa, la opción más drástica pasa por desactivar desde los ajustes de tu teléfono móvil la funcionalidad de geolocalización, esto es, el GPS. De esta forma podremos evitar que las Apps accedan a esta función y, por tanto, puedan recabar datos al respecto.
Sin embargo, si no quieres quedarte “ilocalizado”, por decirlo de alguna forma, también puedes optar por controlar los permisos que le otorgas a cada aplicación, incluido –lógicamente- Google Maps. A través de la configuración de tu cuenta Google y una vez iniciada sesión, podrás acceder a la gestión de tu historial de ubicaciones, pudiendo pausar la recogida de datos al respecto e, incluso, borrar todo el historial de ubicaciones registrado por Google hasta la fecha.
Respecto a las otras muchas aplicaciones que también recaban datos de geolocalización con excusas –en ocasiones- de lo más peregrinas o inexplicables, lo ideal es fijarse bien en los “permisos” solicitados a la hora de instalar las mismas y decidir en ese momento lo que estás o no dispuesto a que los “dueños” de la App en cuestión conozcan sobre tu vida privada. Respecto a las Apps ya instaladas y dando por hecho que tuviste escasa precaución en el momento de instalarlas, la opción pasa por visitar los “permisos” otorgados a cada aplicación en los ajustes de tu dispositivo y retirar aquellos que no consideres oportuno. Porqué, pensándolo un poco, ¿para qué demonios quiere una simple aplicación de “recetas de cocina” permiso para acceder a todos los contactos de mi móvil? En este punto, no te sorprendas si algunas aplicaciones te exigen “obligatoriamente” el aceptar determinados permisos para poder ser instaladas o funcionar correctamente. En ese caso solo cabe decir que ¡la decisión es tuya!
En definitiva, es evidente que como dice el dicho respecto a Internet “si algo es gratuito es que el producto eres tú”. No descubrimos nada si afirmamos que el gran filón de negocio actual en el mundo online es precisamente la recogida y análisis masivo de datos y su posterior venta a todo tipo de multinacionales e, incluso, gobiernos, que orientan sus estrategias de mercado o políticas en función, precisamente, del resultado del análisis masivo de esos datos, que supuestamente, nos reiteran una y otra vez, son siempre “anónimos”. En definitiva, lo que se ha venido a denominar en tiempos recientes el “Big Data”.
En todo caso, ante esta realidad incuestionable de la que participan activamente todas las grandes corporaciones del ámbito tecnológico, no hay que olvidar que, al menos en parte, no estamos totalmente indefensos, si es que la cuestión realmente nos importa. Todo pasa por darse una detallada vuelta por las opciones de privacidad de nuestros dispositivos y de las aplicaciones instaladas y, sobre todo, evitar picar compulsivamente en “Aceptar” cada vez que abrimos una página web, instalamos una App en nuestro móvil o descargamos cualquier programa en nuestro ordenador.
Los bulos siempre han existido pero con la misma facilidad que se propagan, los podemos desmontar con escaso esfuerzo.
Fernando Pellicer Melo
Los bulos o «fake news» siempre han existido. No son un invento de la globalización ni de las Redes Sociales aunque los modernos canales de comunicación social hayan ayudado a su diversificación y extensión como nunca se había conocido en la historia de la humanidad.
La historia está plagada de «fake news» que aún hoy persisten en la memoria colectiva. Así, por ejemplo, la denominada «gripe española» (más correctamente «gripe de 1918») que asoló el mundo a principios del S. XX (se estima que se produjeron entre 50 y 100 millones de fallecimientos) se denominó así por ser España el primer estado en ofrecer estadísticas al respecto así como, al no estar involucrado el país en la Primera Guerra Mundial, por ocupar el tema una mayor atención de la prensa patria al no censurarse especialmente la información sobre la enfermedad, al contrario de lo que ocurría en la mayoría de los países implicados en la Gran Guerra.
Pese a que las estimaciones hablan de 300.000 fallecidos en España, es un hecho ampliamente aceptado por la comunidad científica el situar el origen de la pandemia en los campamentos militares estadounidenses donde se detectaron los primeros casos desde diciembre de 1917 (Fort Greene), expandiéndose la enfermedad rápidamente a otras bases militares. Fueron precisamente los soldados estadounidenses destinados en Europa durante la Gran Guerra los que contribuyeron de forma exponencial a extender la enfermedad por todo el mundo.
Por si quedaran dudas de la persistencia de los bulos a través de la historia, podemos remontarnos a la antigüedad y fijarnos en el supuesto «pirómano» Nerón, en la Roma clásica. En el imaginario popular, alimentado especialmente por la cinematografía, Nerón ha quedado como un «emperador perturbado, de pelo rizado que maltrataba la lira sin compasión» además de, por supuesto, haber arrasado Roma hasta los cimientos en el año 64 d.C. prendiéndole fuego. Sin entrar en valoraciones sobre la figura de Nerón, lo que sí está claro es que no solo la arqueología ha demostrado que el incendio fue fortuito, sino que los estudios históricos indican que Nerón ni tan siquiera se encontraba ese día en Roma. Las fuentes lo sitúan en Antium (la actual Anzio) a más de 60 kilómetros de Roma que, para la época, no era ninguna broma.
Y así podríamos seguir hasta la saciedad señalando sorprendentes «fake news» históricas que se han mantenido como verdades inmutables a lo largo del tiempo y que, aún hoy, forman parte arraigada del imaginario colectivo.
Los bulos, como norma, no son fortuitos ni asépticos. Si bien en muchos casos pudieran ser considerados producto de la deformación de los hechos originales (si es que los hubo) sufrida a lo largo de los siglos en su transmisión oral o escrita, frecuentemente y más en los tiempos contemporáneos, detrás de las «fake news» se suelen esconder oscuros intereses religiosos, políticos y/o económicos.
Aunque como decimos, siempre han existido, es evidente que los bulos se acrecientan, hasta límites insospechados, en tiempos críticos como los que nos ha tocado vivir con la alerta sanitaria y el confinamiento generalizado decretado por el COVID-19. Y es precisamente en estos momentos «expansivos» de los bulos cuando más cuidado y, por qué no decirlo, responsabilidad, hemos de poner de nuestra parte para evitar su extensión. Entre todos podemos evitar incrementar el estado de desinformación y ansiedad de nuestros conciudadanos a poco que nos lo propongamos. Apliquemos en esta cuestión la saludable idea colectiva que tan de moda se ha puesto en relación a la pandemia del COVID-19, esto es… «Este virus lo paramos entre todos».
Como decíamos en la cita inicial, los bulos se pueden «desmontar» con cierta sencillez. Para ello existen en Internet páginas especializadas en comprobar y desmentir las «fake news». Entre ellas y solo por solo citar algunas, encontramos Newtral, Maldita.es o Saludsinbulos, muy oportuna en las actuales circunstancias. Sin embargo, quizás la forma más efectiva de evitar la propagación de bulos es apelar a la inteligencia colectiva. A poco que adoptemos una actitud «proactiva» respecto al aluvión de informaciones que recibimos por infinidad de medios, podremos contribuir decididamente a evitar la propagación de bulos. En este sentido y sin ánimo de ser exhaustivo, quizás cabrían algunas recomendaciones dictadas por el mero sentido común:
Sin necesidad de convertirse en descreídos irredentos, adoptar una posición de cauto escepticismo ante las informaciones que recibimos. No es necesario cuestionarlo todo pero sí desde luego aquellas «noticias» que nos llamen especialmente la atención por su sensacionalismo o excesivo alarmismo.
Abandonar la tendencia a creer en insulsas y aburridas «teorías de la conspiración» tan de moda en algunas cadenas televisivas «sensacionalistas». Vamos, para entendernos, que la Tierra no es plana, el ser humano sí ha pisado la Luna, las pirámides no las construyeron los marcianos y Elvis Presley no simuló su muerte para refugiarse en algún retiro dorado.
Recordar siempre que aunque el dicho diga que la «realidad supera la ficción», en la mayoría de las ocasiones ello no es así. Si una noticia o un mensaje, en primera instancia, nos parece alarmista o excesivamente sorprendente, habrá bastantes probabilidades de que, simplemente, no sea cierto.
Evitar compartir o reenviar compulsívamente y sin mediar reflexión previa (por mínima que sea) los mensajes que nos llegan por muy «buena fuente» que consideremos a su emisor.
Recordar que las Redes Sociales (incluido WhatsApp y medios similares) no son propiamente «medios de comunicación» en sentido informativo. Más bien hay que considerarlos como medios de transmisión de la información la cual, si fuera necesario, hay que verificar con fuentes fiables.
Contrastar las informaciones sospechosas con fuentes fidedignas, bien sean oficiales, periodísticas o de otro tipo que consideremos, precisamente, fiables, dando por hecho que entre estas descartamos medios como «okdiario» y similares y que tenemos claro que «El Mundo Today» es una publicación humorística como su propio encabezado («La actualidad del mañana») apunta. A veces, la cuestión es tan sencilla como realizar una simple búsqueda en Google.
Y ante la duda, simplemente evitar «picar» en reenviar, compartir o lo que corresponda. Así de sencillo.
Conoce algunos de los servicios online más interesantes para probar tus códigos y hacerte la vida más fácil.
Lo primero que debo aclarar (por si prefieres no seguir leyendo y dedicarte a mejores cosas) es que mis conocimientos son prácticamente nulos respecto a los diversos lenguajes de programación. Sin embargo, a lo largo del tiempo, en mi relación con las TIC, me he tenido que enfrentar a la compleja tarea de crear o modificar líneas de códigos por motivos diversos que no vienen al caso.
Obviamente, cuando lo he necesitado, he buscado la solución o las líneas de «código mágico» requeridas preguntando a «Mr. Google» y haciendo uso de los conocimientos previamente compartidos por gente mucho más versada en el tema que el que suscribe. Por supuesto, también a base de muchos ensayos y errores, algo he aprendido para sobrevivir pero no lo suficiente para atreverme a intentar impartir cátedra sobre el tema.
Precisamente la necesidad y falta de conocimientos, me llevó a descubrir desde muy pronto algunos servicios online para probar o validar códigos, fundamentalmente en HTML pero también en CSS o JavaScript.
Este tipo de servicios online resultan fundamentales para aquellos que, como es mi caso, necesitan en algún momento crear o modificar unas pequeñas (o no tan pequeñas) líneas de código para cualquier tarea que estés desarrollando y no cuentan con los conocimientos suficientes para ello.
En Internet encontrarás múltiples opciones con diversas características y funcionalidades. Sín embargo, optando por la sencillez y facilidad de uso, voy a recomendar tres de estos servicios online para realizar este tipo de tareas. Puede que no sean los mejores ni los más «potentes» pero te aseguro que cumplen su cometido holgadamente:
CUBIC FACTORY: El servicio online que utilizo normalmente. Sencillo y sin complicaciones. Válido para comprobar códigos HTML, CSS y JavaScript.
JSBIN: Similar a CUBIC FACTORY. También te permite comprobar tus códigos HTML, CSS y JavaScript.
CSSDESK: En este caso se trata de un servicio que te permite comprobar tus códigos HTML simultáneamente con los estilos aplicados mediante CSS. Muy útil y también sencillo de utilizar.
Los tres servicios, además de ser gratuitos, cumplen con una condición para mi fundamental y es que cuentan con ventana de «resultado», «output» o como la quieras llamar. Es decir, que podrás ver el resultado de tu código en «tiempo real» a medida que vayas escribiendo el mismo en la ventana habilitada para ello.
Y hasta aquí este pequeño aporte que espero te resulte de utilidad ante la siempre ardua tarea de escribir códigos.
Programas para controlar remotamente tu ordenador hay muchos pero, sin duda, AnyDesk es una de las mejores opciones.
Efectívamente, programas para controlar remotamente tu PC, portátil, tableta o móvil hay muchos y muy diversos. Mi experiencia al respecto no es excesiva pero algunos he utilizado. Esencialmente RealVNC que, como es sabido, viene instalado por defecto con el Sistema Operativo Raspbian para Raspberry. De hecho, suele ser el programa «oficial» para controlar remotamente estos sorprendentes microordenadores (dentro de la misma red en mi caso) de una forma cómoda. Para mi resulta imprescindible tanto para el control de mi Magic Mirror como para la «Raspi» con Alexa integrada que me he montado en las últimas semanas. Aunque no es el objeto del post, por aquí te dejo la información para configurar VNC en tu Raspberry.
Sin embargo y más allá de las buenas prestaciones (pese a algún «cuelgue» puntual) de RealVNC para el control remoto de la Raspberry, la cuestión se complica algo más si lo que queremos es controlar otro tipo de dispositivos, especialmente si no se encuentran dentro de la misma red. Como es lógico, ello es posible con esta alternativa pero pronto nos encontraremos con algunos inconvenientes.
El primero y evidentemente más importante es que RealVNC no es gratuito o, para ser más exactos, no es totalmente gratuito. Es decir, si realmente necesitas funcionalidades más avanzadas que las básicas, será necesario que pases por «caja». Y no es que me parezca mal, obviamente. El «conocimiento» hay que pagarlo y la buena gente que está detrás de RealVNC pues también tendrá que comer, imagino. Solo lo cito porque entiendo que será de interés para la concurrencia.
Por otro lado si pretendes utilizar RealVNC para controlar algún dispositivo fuera de tu red, prepárate para «pelearte» con tu router dado que tendrás que abrir puertos y pijaditas semejantes, muy importantes -por supuesto- desde el punto de vista de la seguridad pero que complican el asunto bastante a los no muy duchos (como un servidor) en ese tipo de materias.
Así las cosas y en pleno periodo de confinamiento por el COVID-19, una compañera me pide que le ayude a configurar su nuevo ordenador, comprado expresamente para poder atrincherarse en condiciones en su casa y seguir desarrollando su actividad laboral. Dado que no me veía afrontando tal cuestión a golpe de teléfono o WhatsApp, pensé en el control remoto del portátil para facilitar la cuestión. Descartado -por las razones expuestas- RealVNC, es donde entra en juego mi amigo «Fran» (un entendido en informática pero de los de verdad y no un simple «apañado») el cual me recomendó y aquí llega la razón última de este post, AnyDesk.
Sin obligación de indagar mucho en su configuración, con una instalación simple y una forma de conexión remota más simple aún, pude fácilmente «tomar el control» del portátil de la compañera y hacerle (con su permiso) todas las herejías que me pareció oportuno incluyendo, obviamente, la desinstalación inmediata del Office 365 y sus insistentes propuestas de suscripción que no hay porque soportar existiendo alternativas muy válidas como LibreOffice u OpenOffice. Vale, ya se que no es lo mismo, pero todo es cuestión de acostumbrarse.
Pero volviendo al tema del post, esto es, el control de escritorios remotos mediante AnyDesk, puedo dar fe que su uso es muy sencillo e intuitivo. Lo primero, lógicamente, es descargar el programa en ambos ordenadores (existen versiones para Windows, macOS o Linux además de para Android e IOs). Una vez instalado, simplemente hay que abrirlo y automáticamente asignará a tu dispositivo un número ID de 9 cifras que será el que tendrás que utilizar si estás trasteando con aparatos tuyos o facilitar a la otra persona para que se conecte a tu dispositivo. Es importante señalar que este ID de 9 cifras nunca cambia (que yo sepa). Una vez tengas los 9 dígitos del ordenador al que te quieras conectar, solo tienes que introducirlos en el campo indicado y pinchar, obviamente, en «Conectar«. El ordenador a controlar remotamente recibirá una petición de «autorización» que, una vez aceptada, te permitirá tomar posesión del mismo sin más impedimentos ni configuración.
Creo que no hará falta recordar (pero lo recuerdo) que ambos dispositivos deberán estar encendidos y conectados a Internet porque el programa es bueno pero, milagros, lo que se dice, milagros, no hace…
Una vez estés trasteando con el ordenador a controlar, podrás utilizar otras funcionalidades de interés como, por supuesto, transferir archivos entre un dispositivo y otro.
Una de las características que me parecieron más interesantes del programa es su carácter bidireccional. Es decir, nada de «servidor» y «cliente». Simplemente con tener el programa instalado en ambos dispositivos y conocer el ID correspondiente, podrás enviar tu solicitud de conexión sin mayor problema.
Mencionar que el programa también permite controlar dispositivos de forma «permanente» si se configura adecuadamente por lo que resulta ideal para controlar el ordenador del trabajo desde casa o el de casa desde el móvil o lo que se te ocurra o necesites. Como no era mi caso en estos momentos, sinceramente no exploré esta posibilidad pero dicho queda.
Y hasta aquí esta breve referencia a AnyDesk que espero te haya resultado de interés y utilidad. Ahora solo me queda esperar la llamada de esta gente para que se paguen unas cañitas que sea por la publicidad gratuita que les he hecho.
Buscando proyectos para trastear con mi primera Raspberry, llegué al mundo de los Magic Mirror. Desde entonces y después de algunos meses de aprendizaje y cientos de pruebas y ensayos, he culminado mi primer «Espejo Mágico» que, pese a estar muy contento con el resultado final, considero solo un primer prototipo previo a retos mayores a afrontar en el futuro.
En esencia, un Magic Mirror no es más que un espejo (¿mágico?) que, además de realizar su función -más o menos- como tal, permite mostrar información de muy diverso tipo con un amplio abanico de posibilidades de configuración. Aunque algo existía ya previamente, la popularidad de estos dispositivos, que responden a la filosofía DIY (Do it Yourself), se debe a Michael Teeuw y la enorme y activa comunidad de makers existente en torno al mundo del Magic Mirror.
La «magia» la producen una serie de dispositivos -con especial referencia a la insustituible Raspberry- que, hábilmente, camuflados tras el cristal permiten lograr el efecto deseado, combinados con un potente software de carácter modular que te permite experimentar con infinidad de funcionalidades.
No hace falta decir que pocas aportaciones originales hay en el «prototipo» que voy a comentar en este post (aunque alguna contribución propia quizá se pueda encontrar). En esencia, es una recopilación de información y trabajos de otras personas (especialmente en lo que a los módulos instalados se refiere) a los que agradezco enormemente que hayan puesto sus conocimientos y sabiduría a disposición del personal a través de la red. A todos los «makers» del mundo… ¡Muchas gracias!
En este tutorial, no me pararé con excesivo detalle en el proceso de construcción o configuración del espejo propiamente sino, en esencia, lo que pretendo transmitir son mis experiencias al respecto, así como el resultado final. En todo caso, siempre encontrarás a lo largo de este post una recopilación de los enlaces necesarios para comenzar tu «mágica andadura».
¡Let’s go babe!
¡Sube el volumen! Mi Magic Mirror terminado (de momento).
¿Qué necesitamos?
Pues además de ganas, para desarrollar un proyecto similar (o seguramente mejorado) al que se recoge en este tutorial, unas cuantas cosillas aunque nada difícil de conseguir ni tampoco especialmente caro:
Raspberry Pi con una instalación limpía de Raspbian. En mi caso utilicé una Raspberry 3B+ aunque me consta que se pueden utilizar otros modelos, incluidos la Zero y la flamante Raspberry Pi 4.
Tarjeta MicroSD de calidad. En mi caso, utilizo una SanDisk de 32 GB pero es factible utilizar de menor capacidad.
Televisión o monitor de ordenador del tamaño que desees en función del tipo de Magic Mirror que tengas pensado. (Yo utilice un monitor de desecho de 24 pulgadas -o eso creo- adquirido en una tienda de segunda mano por 5 €.).
Adaptador VGA-HDMI. En mi caso obligado puesto que mi vetusto monitor no contaba con la entrada HDMI necesaria para conectarlo a la Raspberry. En concreto me refiero a algo como la imagen y que, en mi caso, adquirí aquí.
Adaptador HDMI a VGA
Cable HDMI. Mientras más corto mejor por aquello de ahorrar espacio en la «trastienda».
Teclado y un ratón inhalambricos o usb. Necesarios solo para la configuración inicial de la Raspberry. Luego podrás prescindir de ellos.
Un marco reutilizablepara construir la estructura que deberá soportar el espejo o la madera necesaria para ello. Después de varias pruebas, está segunda fue la opción que yo escogí.
Algún conocimiento de inglés. Como siempre ocurre en el mundo DIY, a medida que quieres profundizar en cualquier proyecto, las páginas en español se van quedando cortas y, más pronto que tarde, necesitarás consultar páginas en inglés. Aún así, no debes preocuparte en exceso puesto que en Internet encontrarás también información en español suficiente como para apañártelas. Así que si no controlas el idioma de Shakespeare, tampoco debe ser motivo para desanimarte. Además… ¡Siempre te queda el Google Translate!
Y la esencia del «invento», un espejo espía, también llamado espejo de doble vía, entre otras denominaciones, o si optas por una opción más casera y económica, un simple cristal y un vinilo efecto espejo para ir en plan «maker» ya total. También existen otras posibilidades como utilizar cristales reflectantes como los típicos que se colocan en las fachadas de algunos edificios, por ejemplo. En todo caso, como esta es sin duda la parte más complicada de todo el proyecto, le dedicaremos un apartado específico dentro de este post.
¿Y sí lo complicamos un poco?
Lo anterior sería lo básico y más que suficiente para montar tu Magic Mirror en condiciones pero ¿qué maker que se precie se conforma con lo justo? ¡Uf! una vez comiences y si eres una persona curiosa, probablemente querrás experimentar con otras funciones y dotar a tu nuevo espejo de infinidad de «trucos mágicos» que te servirán para quedar como un campeón cuando vayan tus amigos y amigas a tu casa y les quieras dar la tabarra con tu espejito. Así que, vamos a ver algunas cosillas que le he incorporado a mi proyecto:
Interruptor inalámbricoSONOFF (u otra marca, obviamente) para poder controlar el apagado y encendido de la pantalla de forma sencilla. Como muchos otros dispositivos SONOFF, este interruptor funciona con la App EweLink (también disponible para IOs) además de integrarse perfectamente con Alexa y Google Home. Ello te permitirá programar el apagado y encendido del monitor (por aquello del Planeta y tal) o, simplemente, hacerlo funcionar con el comando de voz que le asignes en tu asistente. ¡Más «magia» para nuestro proyecto! En mi caso, además de instalarlo dentro de la estructura, lo tengo funcionando integrado con Alexa. Concretamente, este es el dispositivo que yo utilicé.
Interruptor Inhalámbrico Sonoff
Disco duro externo para almacenamiento. Pues así de simple. A mi proyecto le he añadido un simple disco duro externo extraído de un viejo portátil y que guardaba en un cajón desde hacía años. Obviamente, está conectado a la Raspberry y oculto tras el espejo. Esencialmente lo utilizó para almacenar mi música que oigo a través de los dispositivos Alexa de mi casa mediante la Skill My Media for Alexa a la que le dedicaré algún post más adelante. Más allá de esto y de realizar copias de seguridad periódicas de la propia configuración del Magic Mirror, no le doy otra función. Esencialmente es una forma de optimizar recursos y de, sobre todo, utilizar el espacio trasero del Magic Mirror para «esconder» algún cacharrillo que si no estaría por ahí ocupando espacio.
Sensores varios conectados mediante la GPIO de la Raspi. Obviamente, si el cerebro de todo el invento es una Raspberry, no es difícil intuir que tu Magic Mirror podrá mejorarse con sensores de todo tipo conectados a la GPIO que permitan mostrar o implementar funcionalidades que enriquezcan notablemente el proyecto. En mi caso y a la espera de nuevos pedidos, tengo instalados dos sensores interactuando con el software del espejo:
Sensor temperatura y humedad interior DHT22 funcionando con el módulo MMM-LocalTemperature aunque hay otros módulos también orientados a la inclusión de este tipo de sensores en nuestro proyecto (tranquilos que más adelante hablaremos con detalle del tema de los módulos, esenciales para que el «invento» funcione).
Y la que, modestamente, considero la «joya de la corona» de mi proyecto… el Sensor PAJ7620u2 (Grove Gesture) funcionando con el módulo MMM-GroveGesture. En mi caso, lo adquirí aquí. Algo caro (18,89 €) pero, lo puedo asegurar, merece la pena aparte de por venir ya soldado y preparado para «conectar», por las muchas posibilidades de interacción que ofrece para el control de tu Magic Mirror. En todo caso, existen otras alternativas más económicas que quizás te puedan funcionar a poco que controles algo de código y, quizás, soldadura. Por ejemplo, yo lo intenté previamente con este sensor aunque lo tuve que dejar por imposible y, finalmente, encargar el indicado. Si no te apañas bien soldando microchip, te sugiero que ni lo intentes. En el apartado dedicado a los módulos de terceros hablaré más detenidamente del sensor PAJ7620u2 y sus posibilidades.
Sensor temperatura y humedad DHT22
Sensor Grove Gesture PAJ7620u2
Construyendo el marco
Vista del Magic Mirror terminado
Detalle del marco y parte del interior
Tras todo lo anterior, es hora de ponernos manos a la obra. Dando por hecho que ya cuentas con todos los materiales necesarios (tranquilo que del cristal ya hablaremos, más adelante) y que, sobre todo, tienes clara la idea de lo que quieres hacer, toca demostrar que realmente eres un verdadero maker y no un simple friki que pasa sus tristes horas libres delante de la pantalla del ordenador. Es hora de ponerse serios, sacar las herramientas y ponernos a fabricar o reciclar la estructura (marco) que soportará todo el invento.
Existen infinidad de post en Internet que explican, paso a paso, como proceder al respecto, bien si quieres construir tu flamante marco desde cero o bien si optas por reciclar alguno que tengas a mano. Yo opté por la primera de las opciones, empleando para la tarea un buen puñado de listones de madera (de bastante buena calidad, por cierto) de un viejo somier que tenía arrinconado en el trastero. Las posibilidades son infinitas al respecto, tanto como tu imaginación. Lo que si es muy importante es que antes de ponerte a cortar tablas como un loco, tengas claro lo que quieres hacer, bien en tu cabeza, bien plasmado en algún boceto. Además, debes tener en cuenta que el marco que va alojar el Magic Mirror debe de tener algo de «fondo» para poder contener los dispositivos necesarios, también deberás considerar que las medidas del mismo dependerán en gran medida de las medidas del monitor o televisor que tengas previsto utilizar. Puedes optar porque el espejo se ajuste a esas medidas y que la información ocupe toda la superficie del cristal o bien, como ocurre en mi caso, puedes optar por un cristal y marco más grande que la propia pantalla que vayas a utilizar de forma que la información se muestre solo en una parte del Magic Mirror, quedando el resto como un simple espejo.
No me voy a detener expresamente en los detalles de la construcción del marco puesto que no soy experto en carpintería (ni en nada, me temo) y porque, como ya te indicaba, existen infinidad de muy buenos «tutos» para ello. Como muestra (encontrarás muchos más en Internet), aquí te dejo algunos de ellos que me sirvieron de inspiración para construir el marco de mi espejo:
Magic Mirror – The casing: En inglés. El propio Michael Teeuw nos orienta sobre la construcción del marco.
Building MirrorMirror: En inglés. Un tutorial completo sobre todo el proceso y también, por supuesto, para la construcción del marco. El marco de mi espejo sigue en gran medida lo aquí explicado.
Building the Frame: En inglés. Foro de la Comunidad Magic Mirror sobre la cuestión del marco.
Ya tengo el marco controlado… Vamos a por la pantalla
En este punto, deberíamos pensar en preparar nuestro monitor o televisor. Para ello es recomendable despojarlo (con cuidado) de la carcasa de plástico a fin de ahorrar espacio y evitar que la pantalla tenga demasiada profundidad dado que ello condicionaría el «fondo» que le vayamos a dar al marco donde colocaremos nuestro espejo. Al realizar esta operación, ten cuidado con no cargarte los controles para manejar el brillo y demás del monitor (si es lo que vas a utilizar) puesto que posteriormente te serán necesarios para controlar estos aspectos del mismo.
La pantalla «encajada» en el Magic Mirror
Aunque en Internet podrás encontrar algunos intentos al respecto, si pretendes reciclar la pantalla de una vieja tablet, portátil o, incluso, móvil (proyectos hay para todos los gustos) debes tener en cuenta que quizás no sea tan buena idea. Estos dispositivos, en principio al menos, puede que quizás cuenten con salida de vídeo (VGA, HDMI u otro tipo) pero en su inmensa mayoría, no cuentan con entrada que es lo que realmente necesitaremos para «proyectar» nuestro Magic Mirror desde la Raspberry en la pantalla escogida. En todo caso, si eres de los makers «voluntariosos» y un amante acérrimo del reciclaje, lo puedes intentar pero debes saber que, con toda probabilidad, necesitarás adquirir una «controladora de vídeo» adecuada para el modelo de tu dispositivo a fin de poder transmitir la imagen desde la Raspi hasta tu flamante y reciclada pantalla. Buscando en Internet encontrarás la información necesaria para ello. Todo un reto que, desde luego, yo preferí ahorrarme, por supuesto.
El problema del cristal
Y digo problema porque, sin duda, es la parte más delicada de todo el proyecto y no lo digo porque se pueda romper (que también aunque espero que no seas tan «manazas») sino por la dificultad existente para conseguir un espejo de doble vía, además de por el notable precio que suelen tener los mismos. En todo caso, siempre nos quedan alternativas viables para conseguir que nuestro proyecto «cristalice» y evitar quedarnos en el camino.
En esencia, lo que necesitamos (bien comprado, bien «fabricado») es un espejo que por una parte haga, más o menos, su función (sería la cara que, obviamente, colocaríamos hacia afuera en nuestro Magic Mirror) y que por la otra permita que pase la luz de la pantalla que vayamos a utilizar. El resto de la superficie trasera del espejo que no esté ocupada con el monitor o TV, deberemos «opacarla» totalmente a fin de evitar que se filtre ninguna luz a través del cristal, más allá de la que proyecta nuestra pantalla con la información que deseemos mostrar. Para este cometido, yo simplemente utilicé algo tan sencillo como cartulina negra y cinta aislante mate de electricidad.
Al respecto y de forma resumida, son varias las opciones existentes para solventar el tema del cristal:
Espejo espía o de doble vía: Esta, sin ningún lugar a dudas, sería la mejor opción en cuanto a resultados (y también la más cara con diferencia). Sin embargo, el problema fundamental reside, además de en el precio, en que no es nada fácil encontrar este tipo de material al menos en España. Probablemente, tu primer impulso sea acercarte a la cristalería del barrio y preguntarle al paisano de turno sobre la cuestión. No está de más hacerlo pero, con mucha probabilidad, el amigo te mirará con cara extraña y no será capaz de solventarte el problema. Ello no significa, por supuesto, que no puedan existir cristalerías patrias que suministren este tipo de productos pero, desde luego no es tarea fácil. Respecto a la opción de adquirirlo por Internet, tampoco es cuestión sencilla, al menos desde Canarias que es donde resido, puesto que, por ejemplo, Amazon -donde he visto que se ofertan- no envía (como otros tantos) este tipo de materiales al archipiélago. Por lo que he averiguado al respecto, existe la posibilidad de encargar online tu espejo espía a algún proveedor extrajero. Por ejemplo, allá por Alemania (creo) hay un tipo que se encarga de gestionarte tu pedido y remitírtelo a tu domicilio, eso sí, a un precio realmente notable. Me consta que algún compañero interesado en este mundillo ha optado por esta vía, con muy buen resultado. Por si te interesara, aquí encontrarás información al respecto si es que el amigo sigue en el «negocio». Igualmente, aquí te dejo una lista de proveedores en la que, como podrás comprobar, no figura ninguno de España.
Cristales «efecto espejo» para ventanas y fachadas: Muy utilizados en arquitectura, son fáciles de encontrar en cristalerías grandes. Los hay de diverso tipo, calidades y marcas y, en general, ofrecen un resultado óptimo aunque tienden a mostrar un reflejo notablemente oscurecido (pura cuestión de ciencia física en la que no nos detendremos). Por contra, cuentan a su favor con su moderado coste y la facilidad para encontrarlos. Acércate a una buena cristalería y pregunta si estás interesado en esta opción.
Vinilo efecto espejo: Finalmente, la opción más asequible aunque, probablemente, la que peores resultados ofrezca en cuanto a calidad del reflejo ofrecido por nuestro Magic Mirror, es utilizar un vinilo «efecto espejo» para adherirlo al cristal (en este caso, un cristal normal) que utilicemos para nuestro «invento». Esta, finalmente, es la alternativa por la que opte en la construcción de mi Magic Mirror. Te adelanto que si bien es la opción más asequible y viable, deberás armarte de paciencia porque la instalación del vinilo no es nada sencilla (a menos que no te importe que tu espejo se vea lleno de burbujas y rayones de todo tipo, claro). En mi caso, opté por la compra online de este producto que, sin duda, es uno de lo de mejor calidad que puedes encontrar en el mercado. En todo caso, te recomiendo encarecidamente que compres más metros de los que en principio piensas que vas a necesitar puesto que es probable que una buena parte la desperdicies haciendo pruebas hasta obtener el resultado deseado (un espejo más o menos en condiciones). En el anterior enlace también encontrarás este vídeo (en español) que te explica como realizar la delicada operación de colocación del vinilo. Aunque en el vídeo parece muy fácil, te aseguro por experiencia que no lo es.
Para ir finalizando este apartado, recomendarte que bien adquieras un espejo de doble vía o bien un simple cristal transparente para incorporarle un vinilo, el mismo deberá tener un grosor mínimo de 4 mm o más a fin de que soporte correctamente la presión de los dispositivos a colocar detrás del mismo al tiempo que evitar peligrosas roturas a la hora de manejarlo. Cierto es que a mayor grosor, más oscuro será el efecto «espejo» conseguido pero la seguridad ante todo.
También, me consta, que hay gente que ha sustituido el cristal por metacrilato u otros materiales. Hago referencia a ello pero no entro en detalles dado que no llegué a experimentar al respecto.
Configurando nuestro Magic Mirror
Toca el momento de entrar en la parte del Software, tanto de la Raspberry como del Magic Mirror propiamente. Evidentemente, podríamos haber comenzado nuestro proyecto (y quizás sería lo más recomendable) por esta parte más de “código” y “consola” y no por los aspectos más “manuales” abordados anteriormente pero, en cualquier caso, esto ya es cuestión de gustos y de lo que tengas a mano. En definitiva, si tienes la madera pues puedes comenzar por el marco y si lo que tienes es una Raspberry olvidada, cogiendo polvo en algún cajón, pues empieza por aquí. La cuestión es comenzar e irte ilusionando con el proyecto sin necesidad de esperar a contar con todos los elementos necesarios para su desarrollo.
Poniendo «en marcha» nuestra Raspberry
Como comentaba anteriormente, en mi caso he utilizado una Raspberry 3B+ con Raspbian pero puedes utilizar otros modelos de Raspi sin problemas. Información para ello encontrarás sobradamente en Internet.
Raspberry PI 3B+
Doy por hecho que tienes algún conocimiento sobre como “echar a andar” tu Raspberry pero ante la duda lo mejor es tirar de la gente que realmente sabe de estas cosas y seguir sus pasos y recomendaciones, punto por punto. En este sentido y como poco podría yo añadir a lo que otros ya han escrito como mucho más conocimiento de causa, aquí te dejo los enlaces necesarios para que puedas configurar adecuadamente tu miniordenador:
Setting up your Raspberry Pi. En inglés. Nada mejor que acudir a la Fundación Raspberry para aprender a poner en marcha nuestro dispositivo.
Es importante considerar que aunque en los enlaces anteriores podrás encontrar otras alternativas, es recomendable que instales el sistema operativo “oficial” de Raspberry (Raspbian) a fin de poder desarrollar nuestro proyecto de Magic Mirror. Para que no haya dudas al respecto, en este enlace encontrarás los archivos necesarios. Tenlo en cuenta si, como es habitual, utilizas Noobs (una herramienta de instalación rápida con diferentes sistemas operativos a escoger) a la hora de configurar tu Raspberry.
Finalmente y como comprobarás rápidamente, es precisamente en este momento cuando vas a necesitar echar mano del teclado y ratón que mencionamos entre lo “necesario”, al comienzo de este tutorial, para poder configurar tu Raspberry.
Señalar que dado que la Raspberry va a estar oculta tras el espejo junto con otros dispositivos que, obviamente, generarán calor, es importante garantizar su adecuada ventilación para evitar “calentones” innecesarios. Bastará con garantizar algunos agujeros de ventilación en el marco y dotar a nuestro micrordenador de los típicos disipadores de temperatura y algún pequeño ventilador.
Instalando y configurando el Magic Mirror
¡Y llegó el gran momento! Por fin vamos a comenzar con la instalación del software necesario para que nuestro Magic Mirror cobre vida.
Una vez tengamos configurado adecuadamente Raspbian en nuestra Raspberry, es el momento de instalar los paquetes necesarios para nuestro Magic Mirror. Lo más recomendable, como siempre, es acudir a la fuente original y seguir, paso a paso, las instrucciones indicadas. Al respecto, aquí te dejo los enlaces necesarios donde encontrarás toda la información para proceder correctamente:
Foro Raspberry sobre Magic Mirror. En español. Siempre es una buena idea darse una vueltita por los muchos foros existentes en la comunidad Magic Mirror para aclarar las dudas que nos puedan surgir.
Configurando los módulos de nuestro Magic Mirror
Una de las características, en mi opinión, más interesantes del Magic Mirror es su carácter modular. Es decir, una vez instalado el paquete básico que ya viene con unos módulos por defecto, se abre un inmenso abanico de posibilidades para instalar infinidad de módulos de terceros desarrollados por la activa comunidad existente en torno a este tipo de proyectos.
La mayoría de los módulos (no siempre) indican como realizar la instalación que siempre suele ser similar. En esencia, consiste en clonar vía consola el repositorio que corresponda al módulo escogido dentro del directorio “/home/pi/MagicMirror/modules/” que, si todo ha ido bien, deberías encontrar en la ruta indicada. Además, es posible que en algún caso se te solicite instalar determinadas dependencias, todo ello a través de tu terminal. Una vez realizado este proceso, deberás editar el archivo “config.js” que encontrarás en la ruta “/home/pi/MagicMirror/config/” para incluir en el mismo la configuración básica del módulo así como escoger entre las diferentes opciones de que te proponga el autor/a del mismo.
Sin duda, la configuración del archivo “config.js” puede ser la parte más tediosa y delicada del asunto puesto que ya entramos en terreno de “códigos” lo cual para alguien como yo, poco ducho en la materia, obviamente es lo más complicado. Si controlas sobre estos temas y estás acostumbrado a trastear con distribuciones linux, será pan comido, y si, como es mi caso, no es así, pues ármate de paciencia y, sobre todo, no olvides realizar siempre una copia de seguridad del archivo “config.js” antes de introducir ninguna modificación en el mismo.
De todas formas, no es difícil “cogerle el truco”, especialmente si sigues los ejemplos de configuración básica inicial que encontrarás en la propia documentación de instalación del software. Es muy importante que prestes mucha atención a la sintaxis del archivo “config.js” porque cualquier pequeño error puede impedir que tu Magic Mirror cargue correctamente. En todo caso, si después de cualquier cambio en la configuración, el espejo no arranca adecuadamente, fíjate en la línea de error que te mostrará la consola para poder solucionarlo.
Igualmente, si te lo exige la configuración del módulo (no es lo habitual) o si simplemente deseas experimentar al respecto, también podrás realizar modificaciones en la configuración de estilos a través de del archivo genérico de configuración “custom.css” que deberías encontrar en “/home/pi/MagicMirror/css/” así como de los diferentes “nombrearchivo.css” de cada módulo que encontrarás en sus correspondientes directorios. Sea como sea, vaya por delante mi recomendación de manejar estos archivos con “prudencia” y siempre realizar copias de seguridad antes de meterte a “trastear” con los códigos. ¡Avisado quedas!
Instalando módulos de terceros
Quizás, la parte más “divertida” de todo el proyecto. Existen infinidad de módulos desarrollados por la comunidad que son los que realmente, una vez instalados los “default modules”, van a darle vida y personalidad a tu Magic Mirror.
Recuerda que los “default modules” con los que contarás en la instalación inicial, también aceptan modificaciones de configuración. Por si te sirve de idea y entre otras modificaciones que he introducido en los módulos por defecto, en mi caso, los mensajes del módulo “Compliments” están adaptados a la previsión del tiempo así como a la hora del día. Es decir, aparte de algunos genéricos, los consejos ofrecidos dependerán de la climatología y del momento del día. Igualmente, el modulo “Calendar” en mi caso lo utilizo para conocer la previsión de las mareas de la Playa de mi ciudad así como la hora de salida y puesta del Sol. Por su parte, el módulo NewFeeds lo tengo “duplicado”, mostrándose en uno noticias de mi zona y en otro noticias internacionales.
Entrando propiamente en los “modulos de terceros”, en esencia, existen dos repositorios fundamentales para buscar y probar módulos de terceros. Ambos los encontrarás en GitHub. Aquí tienes los enlaces:
3rd Party Modules. El listado de módulos por excelencia, ordenados por temáticas. La mayoría están “operativos” pero también es frecuente encontrar algunos “abandonados”. Todo es cuestión de ir probando.
Legacy Modules. Listado de módulos ordenados alfabéticamente. En ocasiones encontrarás, básicamente, los mismos o versiones previas de los ya existentes en el listado anterior. También aquí podrás encontrar módulos interesantes y totalmente operativos.
Modulos de terceros instalados en mi proyecto
Durante estos meses dedicados a la construcción del Magic Mirror he probado infinidad de módulos (no todos los existentes, ni mucho menos, por supuesto) hasta al final quedarme con la selección que relacionaré a continuación. Por supuesto, esto es absolutamente arbitrario y los módulos a instalar dependerán exclusivamente de tus necesidades, gustos y preferencias. Todos los módulos indicados, los encontrarás en los enlaces anteriores, especialmente en el primero de ellos (3rd Party Modules.).
Dado que, como indico, esta es una cuestión muy personal, me limitaré simplemente a mencionar los módulos que tengo actualmente instalados (nunca se sabe lo que pasará mañana) y comentaré algún aspecto que pueda considerar de interés sobre los mismos:
MMM-pages. Fundamental si piensas instalar muchos módulos. Te permite organizar los mismos en diferentes páginas. Existen otras alternativas interesantes para conseguir algo parecido como puede ser MMM-Carousel que te permite “alternar” entre módulos.
MMM-UVIndex. Módulo que me informa sobre la intensidad de los Rayos UVA en mi localidad.
MMM-AirQuality. Me indica la calidad del aire en mi localidad.
MMM-Tools. Imprescindible para conocer como va tu “Raspi”. Uso CPU, RAM, temperatura y demás…
MMM-Buller. La solución que utilizo (muy útil para mi) para visualizar mis tareas de Google Task en el espejo.
MMM-CalendarExt2. Algo complicado de configurar pero muy versátil. Una alternativa muy completa al calendario por defecto.
MMM-DarkSkyForecast. Uno de los tantos módulos sobre el tiempo que hay disponibles. Muy atractivo visualmente y fácil de configurar.
MMM-TouchPlayerBasic. Un reproductor de música tan sencillo como poco útil. En esencia, una curiosidad.
MMM-network-signal. Pues eso mismo.
MMM-GoogleFit. Un módulo muy curioso aunque algo limitado que te permite visualizar tu actividad sincronizado con Google Fit.
MMM-GoogleFit2. Lo mismo pero para una segunda persona.
MMM-BackgroundSlideshow. Permite colocar una serie de imágenes de fondo (ocupando toda la pantalla) y rotar automáticamente entre las mismas.
MMM-SimpleLogo. Pues eso. Una forma fácil de colocar alguna imagen concreta en cualquier espacio.
MMM-NewsFeedTicker. Un módulo muy “chulo” aunque mejorable. Puedes configurar fuentes de noticias que irán pasando en un franja (lo típicos de los informativos).
MMM-Widget. Te permite insertar en tu Magic Mirror cualquier tipo de Widget. En mi caso, tengo insertados tres dedicados a mi equipo de fútbol predilecto.
MMM-LocalTemperature. Vinculado con el sensor DHT22 que comentábamos con anterioridad. Me permite conocer la temperatura y humedad interior.
MMM-TelegramBot. Muy interesante. Te permite cierto control sobre tu Magic Mirror a través, obviamente, de Telegram.
MMM-Cursor. Un simple cursor de ratón útil cuando el espejito se pone rebelde o quieres realizar alguna operación sencilla. Obviamente, tienes que contar con un ratón inhalámbrico conectado a tu Magic Mirror.
MMM-GroveGestures. También algo ya comentamos en la anterior entrega. Vinculado con el sensor Sensor PAJ7620u2 (Grove Gesture) permite controlar el espejo mediante gestos. Sin duda, una alternativa muy interesante sobre cuyas posibilidades ya has podido visualizar una pequeña demostración en este vídeo ya publicado en este mismo tutorial. Dado el interés que entiendo puede despertar este módulo, le dedicaremos un apartado especial más adelante.
MMM-page-indicator. Nos indica, mediante un circulito situado en la parte inferior de cada página, el número de páginas de tu Magic Mirror y en cual estás. No tiene más función.
MMM-ImageSlideshow. Permite insertar una imagen de forma simple. Lo utilizo para un pequeño “menú” recordatorio de los gestos que utilizo y que tengo fijado en la parte inferior de todas las páginas.
MMM-MotionDetector. Entre otras funciones, te puede servir para programar el encendido y apagado de la pantalla en función del movimiento detectado por una cámara. Aunque funcionaba perfectamente, en estos momentos lo he desactivado y he retirado la cámara del Magic Mirror por simples razones de seguridad. La cuestión del encendido y apagado de la pantalla lo he solucionado finalmente con el interruptor inhalámbrico SONOFF ya mencionado en la anterior entrega y con el MMM-GroveGestures que ofrece una opción al respecto mediante gestos.
MMM-GooglePhotos. Obviamente, un módulo que te permite visualizar tus álbumes de fotos de Google Photos. Funciona sin problemas aunque en estos momentos lo tengo desactivado dado que tengo la impresión de que consume excesivos recursos y me ralentiza todo el sistema por no decir que directamente lo “tumba”.
¿En qué áreas de la pantalla coloco mis modulos?
Pues no es una cuestión menor esta, especialmente cuando comiences a acumular módulos y más módulos y el espacio “disponible” se vaya acabando. Como ya he indicado, existen soluciones si tu intención es llenar el Magic de módulos pero también es relevante conocer las distintas “áreas” o “regiones” donde puedes ubicar la información a mostrar por tus módulos. La mayoría de ellos te indicarán cual es la mejor área para ubicarlos aunque, en muchas ocasiones, solo sera una recomendación opcional (no en algunos módulos que “solo” te funcionarán correctamente en la ubicación que su autor/a te indique). Para todo ello a mi me resultó de mucha utilidad esta sencilla explicación gráfica sobre las diferentes áreas útiles de tu Magic Mirror a la hora de organizar los módulos:
Y aquí la explicación de los códigos de colores anteriores:
top_bar and bottom_bar are light gray.
top_left and bottom_left are red.
top_center and bottom_center are blue
top_right and bottom_right are green
upper_third is yellow
middle_center is cyan
lower_third is magenta
Y como de “bien nacidos es ser agradecidos”, aquí les dejo enlace original de donde obtuve la información anterior.
Algo más sobre el MMM-GroveGestures
Buscando un sistema para interactuar con mi Magic Mirror, más allá del control por voz que no me motivaba especialmente al haber ya experimentado mucho con los dispositivos Alexa y Google Home y no resultarme especialmente novedoso, me topé con el módulo MMM_GroveGestures. Mediante el mismo y contando con el ya mencionado sensor PAJ7620u2 (Grove Gesture) conectado a nuestra Raspberry a través, obviamente, de los pines adecuados de la GPIO, es posible controlar tu Magic Mirror mediante gestos desde una distancia máxima (aproximadamente) de unos 20 cm. Ofrece por defecto nueve gestos diferentes (UP, DOWN, LEFT, RIGHT, FORWARD, BACKWARD, CLOCKWISE, ANTI-CLOCKWISE Y WAVE) pero, además, permite realizar combinaciones de dos, tres o más movimientos con ellos lo cual multiplica exponencialmente las posibilidades. Lógicamente, si creas muchas “combinaciones de gestos”, además de poner a prueba tu memoria, también incrementarás las posibilidades de error a la hora de ejecutar los mismos ya que la sensibilidad del sensor es bastante notable.
Este sistema te posibilitará no solo enviar notificaciones a tu Magic Mirror y a aquellos módulos que acepten tal funcionalidad sino también y esto me parece muy relevante, ejecutar comandos con tu Raspberry como si estuvieras trabajando con la consola.
Por ejemplo, en mi caso tengo una serie de gestos vinculados al programa “mpg123” lo que me permite escuchar música desde el disco duro externo integrado en el espejo (una Playlist previamente configurada para ser concretos) así como subir y bajar el volumen, entre otras funciones. Aunque evidentemente resultaría fácil integrar unos simples altavoces en el Magic, en este momento y hasta que encuentre los adecuados, utilizo un altavoz externo conectado por bluetooth o cable, según esté de humor.
Como ya he comentado y entre otras posibilidades, también podrás utilizar el sensor para activar tu pantalla o, pasado el tiempo que especifiques sin recibir ningún gesto, conseguir que se apague automáticamente. En definitiva, múltiples opciones que te animo a explorar.
Montaje final del Magic Mirror
Obviamente, en algún momento, tendremos que realizar el “montaje” de todo el invento. Es decir, colocar nuestra Raspberry, pantalla y demás elementos dentro de la estructura que hayamos fabricado para nuestro Magic Mirror. Dado que las posibilidades al respecto son infinitas y dependerá en gran medida de nuestras preferencias y objetivos, me limito a compartir algunas imágenes de las “tripas” de mi Magic Mirror que espero sean de utilidad para proceder al montaje final del mismo:
¿Y hay más?
Pues sí. Hay mucho más pero, de momento, hasta aquí he llegado y creo que tampoco seguiré profundizando mucho más en la cuestión dado que estoy relativamente satisfecho con el resultado final de mi proyecto, aunque esté feo que yo lo diga.
Solo como apunte, y a modo ejemplo de otras posibilidades existentes, no me olvido de la implementación del proyecto con control por voz (tanto con Alexa como Google Home), para lo cual existen numerosas opciones de módulos, o algo que a mi me parece incluso más interesante al tiempo que complejo, como es el reconocimiento facial y las posibilidades de respuesta personalizada del Magic Mirror que ello ofrece. En los enlaces a los módulos de terceros encontrarás también propuestas al respecto.
¿Qué será lo próximo?
Como decía casi al principio del post, cuando empiezas es realmente difícil parar con este tipo de proyectos dada la cantidad de posibilidades que ofrece. Aunque ya he dado el Magic Mirror “oficialmente” por terminado, no es menos cierto que estoy pendiente de recibir un sensor PIR y un interruptor giratorio KY-040 por aquello de seguir “experimentando” aunque, sinceramente, no se si me quedarán pines libres en la GPIO para seguir conectando chismes a la Raspberry.
Looking for projects to mess with my first Raspberry, I came to the world of Magic Mirror. Since then and after a few months of learning and hundreds of tests and trials, I have completed my first «Magic Mirror» which, despite being very happy with the final result, I consider only a first prototype prior to major challenges to be faced in the future .
In essence, a Magic Mirror is nothing more than a (magical?) Mirror that, in addition to performing its function -more or less- as such, allows to display information of very different types with a wide range of configuration possibilities. Although something already existed previously, the popularity of these devices, which respond to the DIY (Do it Yourself) philosophy, is due to Michael Teeuw and the enormous and active community of makers existing around the world of the Magic Mirror.
The «magic» is produced by a series of devices -with special reference to the irreplaceable Raspberry- that, cleverly camouflaged behind the glass, allow the desired effect to be achieved, combined with powerful modular software that allows you to experiment with infinite functionalities.
It goes without saying that few original contributions are in the «prototype» that I am going to comment on in this post (although some own contribution may be found). In essence, it is a compilation of information and work from other people (especially as regards the installed modules) that I greatly appreciate that they have made their knowledge and wisdom publicy available via the network. To all the makers of the world… Thank you very much!
In this tutorial, I will not dwell in too much detail on the mirror construction or configuration process itself, but essentially what I intend to convey are my experiences in this regard as well as the end result. In any case, you will always find throughout this post a compilation of the necessary links to start your «magical journey».
Let’s go babe!
Turn up the volume! My Magic Mirror finished (for now).
What do we need?
Well, in addition to your desire, to develop a project similar (or surely improved) to the one explained in this tutorial, a few little things, although nothing difficult to get or especially expensive:
Raspberry Pi with a clean install of Raspbian. In my case I used a Raspberry 3B+ although I know that other models can be used, including the Zero and the brand new Raspberry Pi 4.
Quality MicroSD card . In my case, I use a 32 GB SanDisk but it is feasible to use a smaller capacity.
Television or computer monitor of the size you want depending on the type of Magic Mirror you have in mind. (I used a 24-inch waste monitor – or so I think – purchased from a thrift store for € 5.).
VGA-HDMI adapter . In my case, since my old monitor did not have the necessary HDMI input to connect it to the Raspberry. Specifically, I am referring to something like the image and that, in my case, I acquired here .
HDMI to VGA adapter
HDMI cable . The shorter the better for saving space in the «back room».
Wireless and usb keyboard and mouse. Required only for the initial configuration of the Raspberry. Then you can do without them.
A reusable frame to build the structure that must support the mirror or the wood necessary for it . After several tests, this second one was the option that I chose.
Some knowledge of English. As always happens in the DIY world, as you want to delve into any project, the Spanish pages are falling short and sooner rather than later, you will need to consult English pages. Even so, you should not worry excessively since on the Internet you will also find enough information in Spanish to cope. So if you don’t control Shakespeare’s language, it shouldn’t be a reason to be discouraged either. Also … You always have the Google Translate!
And the essence of the «invention», a spy mirror, also called a two-way mirror , among other denominations, or if you opt for a more homemade and economic option, a simple glass and a mirror-effect vinyl to go as a «maker» plan now total. There are also other possibilities such as using reflective glass like the typical ones that are placed on the facades of some buildings, for example. In any case, as this is undoubtedly the most complicated part of the entire project, we will dedicate a specific section within this post.
What if we complicate it a bit?
The above would be the basics and more than enough to mount your Magic Mirror in conditions but what self-respecting maker settles for the right thing? Phew! once you start and if you are a curious person, you will probably want to experiment with other functions and provide your new mirror with infinity of «magic tricks» that will serve to make you look like a champion when your friends go to your house and want to pester them with your mirror. So, let’s see some things that I have incorporated into my project:
SONOFF wireless switch (or other brand, obviously) to control the on and off of the screen easily. Like many other SONOFF devices, this switch works with the EweLink App (also available for IOs) as well as seamlessly integrating with Alexa and Google Home. This will allow you to program the monitor on and off (for that of the Planet and such) or, simply, make it work with the voice command that you assign in your assistant. More «magic» for our project! In my case, in addition to installing it inside the structure, I have it working integrated with Alexa. Specifically, this is the device that I used .
Sonoff Wireless Switch
External hard drive for storage. Well, it’s that simple. To my project I have added a simple external hard drive removed from an old laptop and kept in a drawer for years. Obviously, it is connected to the Raspberry and hidden behind the mirror. Essentially he used it to store my music that I hear through the Alexa devices of my house through the Skill My Media for Alexa to which I will dedicate a post later. Beyond this and making regular backups of the Magic Mirror’s own settings, I give it no other function. Essentially it is a way of optimizing resources and, above all, using the rear space of the Magic Mirror to “hide” some gadget that would otherwise be taking up space.
Various sensors connected by the Raspi GPIO . Obviously, if the brain of the whole invention is a Raspberry, it is not difficult to intuit that your Magic Mirror can be improved with all kinds of sensors connected to the GPIO that allow showing or implementing functionalities that greatly enrich the project. In my case and waiting for new orders, I have installed two sensors interacting with the mirror software:
DHT22 indoor temperature and humidity sensor working with the MMM-LocalTemperature module although there are other modules also aimed at the inclusion of this type of sensors in our project (rest assuredthat later we will talk in detail about the modules, essential for the “invention ”Works).
And the one that, modestly, I consider the «jewel in the crown» of my project … the Sensor PAJ7620u2 (Grove Gesture) working with the MMM-GroveGesture module . In my case, I got it here. Something expensive (€ 18.89) but, I can assure you, it is worth it apart from coming already welded and ready to “connect”, due to the many possibilities of interaction it offers to control your Magic Mirror. In any case, there are other cheaper alternatives that perhaps can work for you after you control some code and, perhaps, solder. For example, I previously tried this sensor although I had to leave it as impossible and finally order the right one. If you don’t do well by microchipping, I suggest you don’t even try. In the section dedicated to third-party modules I will talk more about the PAJ7620u2 sensor and its possibilities.
DHT22 temperature and humidity sensor
Grove Gesture PAJ7620u2 Sensor
Building the framework
After all of the above, it is time to get down to business. Taking for granted that you already have all the necessary materials (rest assured that we will talk about glass later on) and that, above all, you have a clear idea of what you want to do, it’s time to show that you really are a true maker and not just a simple one geek who spends his sad free hours in front of the computer screen. It is time to get serious, take out the tools and start manufacturing or recycling the structure (frame) that will support the entire invention.
There are countless posts on the Internet that explain, step by step, how to proceed in this regard, either if you want to build your brand new frame from scratch or if you choose to recycle one that you have on hand. I opted for the first option, using for the task a good handful of wooden slats (of a fairly good quality, by the way) from an old bed base that had been cornered in the storage room. The possibilities are endless in this regard, as much as your imagination. What is very important is that before you start cutting boards like crazy, be clear about what you want to do, well in your head, well reflected in some sketch. In addition, you should bear in mind that the frame that will house the Magic Mirror must have some «background» to be able to contain the necessary devices, You should also consider that the measurements of the same will largely depend on the measurements of the monitor or television that you plan to use. You can choose to have the mirror adjust to those measurements and that the information covers the entire surface of the glass, or, as in my case, you can choose a glass and frame larger than the screen you are going to use so that the information is displayed only in one part of the Magic Mirror, leaving the rest as a simple mirror.
I am not going to stop expressly in the details of the construction of the frame since I am not an expert in carpentry (or anything, I’m afraid) and because, as I already indicated, there are infinite number of very good «tutos» for it. As a sample (you will find many more on the Internet), here are some of them that inspired me to build my mirror frame:
Magic Mirror – The casing : In English. Michael Teeuw himself guides us on the construction of the frame.
Building MirrorMirror: In English. A complete tutorial on the whole process and also, of course, for the construction of the frame. The frame of my mirror largely follows what is explained here.
Building the Frame: In English. Magic Mirror Community Forum on the framework issue.
Magic Mirror using an IKEA RIBBA framework: In English. Within the possibilities, you can also recycle a frame that you already have around or that you acquire for the occasion.
I already have the frame controlled… Let’s go to the screen
At this point, we should think about preparing our monitor or television. For this, it is advisable to strip it (carefully) of the plastic casing in order to save space and avoid that the screen has too much depth since this would condition the “background” that we are going to give to the frame where we will place our mirror. When performing this operation, be careful not to overload the controls to manage the brightness and other of the monitor (if it is what you are going to use) since they will later be necessary to control these aspects of it.
The screen «embedded» in the Magic Mirror
Although on the Internet you can find some attempts in this regard, if you intend to recycle the screen of an old tablet, laptop or even mobile (there are projects for all tastes) you should bear in mind that it may not be such a good idea. These devices, in principle at least, may perhaps have video output (VGA, HDMI or other) but in the vast majority, they do not have an input which is what we will really need to «project» our Magic Mirror from the Raspberry on the chosen screen. In any case, if you are one of the “willing” makers and a staunch lover of recycling, you can try it, but you should know that, in all probability, you will need to purchase a suitable “video controller” for the model of your device in order to be able to transmit the image from the Raspi to your brand new and recycled screen. Searching the Internet you will find the necessary information for it. A challenge that, of course, I preferred to save myself, of course.
The glass problem
And I say problem because, without a doubt, it is the most delicate part of the whole project and I am not saying it because it can break (which also, although I hope you are not so “big”) but because of the difficulty in obtaining a double-track mirror. , in addition to the remarkable price that they usually have. In any case, we always have viable alternatives to ensure that our project «crystallizes» and avoid staying on the road.
In essence, what we need (well bought, well «manufactured») is a mirror that on the one hand does, more or less, its function (it would be the face that, obviously, we would place outwards in our Magic Mirror) and that on the another allows the light of the screen that we are going to use to pass. The rest of the rear surface of the mirror that is not occupied with the monitor or TV, we must «opaque» it completely in order to avoid any light filtering through the glass, beyond that projected by our screen with the information we want to show. For this purpose, I simply used something as simple as black cardboard and matte electrical tape.
In this regard and in summary, there are several options available to resolve the issue of glass:
Spy or double track mirror: This, without a doubt, would be the best option in terms of results (and also the most expensive by far). However, the fundamental problem lies, in addition to the price, in that it is not at all easy to find this type of material at least in Spain. Probably your first impulse is to go to the neighborhood glassware and ask the countryman on duty about the matter. It does not hurt to do it but, in all probability, the friend will look at you with a strange face and will not be able to solve the problem. This does not mean, of course, that there can be no national glassware that supplies this type of product, but, of course, it is not an easy task. Regarding the option of acquiring it on the Internet, it is not an easy matter, at least from the Canary Islands, which is where I reside, since, for example, Amazon – where I have seen that they are offered – does not send (like many others) this type of materials to the archipelago. From what I have found out about it, there is the possibility of ordering your spy mirror online from a foreign supplier. For example, back in Germany (I think) there is a guy who is in charge of managing your order and sending it to your home, yes, at a really remarkable price. I know that a colleague interested in this world has opted for this route, with very good results. In case you were interested, at a really remarkable price. I know that a colleague interested in this world has opted for this route, with very good results. In case you were interested, at a really remarkable price. I know that a colleague interested in this world has opted for this route, with very good results. In case you were interested, here you will find information about it if the friend is still in the «business». Likewise, here I leave you a list of providers in which, as you can see, none of Spain is listed.
«Mirror effect» glass for windows and facades: Widely used in architecture, they are easy to find in large glassware. There are different types, qualities and brands and, in general, they offer an optimal result although they tend to show a remarkably obscured reflection (purely a matter of physical science in which we will not stop). On the contrary, they count in their favor with their moderate cost and the ease of finding them. Come to a good glassware and ask if you are interested in this option.
Mirror effect vinyl: Finally, the most affordable option, although probably the one with the worst results in terms of the quality of the reflection offered by our Magic Mirror, is to use a «mirror effect» vinyl to adhere it to the glass (in this case, a glass normal) that we use for our “invention”. This, finally, is the alternative that I chose in the construction of my Magic Mirror. I anticipate that although it is the most affordable and viable option, you must arm yourself with patience because the installation of the vinyl is not easy (unless you do not mind that your mirror is full of bubbles and scratches of all kinds, of course). In my case, I opted for the online purchase of this product which, without a doubt, is one of the best quality you can find on the market. In any case, I highly recommend that you buy more meters than you initially think you will need, since it is likely that a good part will be wasted testing to obtain the desired result (a mirror more or less in condition). In the previous link you will also find this video (in Spanish) that explains how to perform the delicate operation of placing the vinyl. Although in the video it seems very easy, I assure you from experience that it is not.
To finish this section, we recommend that you either acquire a double-track mirror or a simple transparent glass to incorporate a vinyl, it must have a minimum thickness of 4 mm or more in order to properly support the pressure of the devices to place behind it while avoiding dangerous breakages when handling it. It is true that the greater the thickness, the darker the “mirror” effect achieved, but safety above all.
To finish this section, we recommend that you either acquire a double-track mirror or a simple transparent glass to incorporate a vinyl, it must have a minimum thickness of 4 mm or more in order to properly support the pressure of the devices to place behind it while avoiding dangerous breakages when handling it. It is true that the greater the thickness, the darker the “mirror” effect achieved, but safety above all.
Also, I am aware that there are people who have replaced glass with methacrylate or other materials. I refer to it but I do not go into details since I did not get to experiment on it.
Setting up our Magic Mirror
It touches the moment of entering the Software part, both of the Raspberry and of the Magic Mirror itself. Obviously, we could have started our project (and perhaps it would be the most recommended) for this more part of «code» and «console» and not for the more «manual» aspects discussed above but, in any case, this is already a matter of taste and what you have on hand. In short, if you have the wood, you can start with the frame and if what you have is a forgotten Raspberry, picking up dust in a drawer, it starts here. The question is to start and get excited about the project without waiting to have all the necessary elements for its development.
Launching our Raspberry
As I mentioned before, in my case I have used a Raspberry 3B + with Raspbian but you can use other Raspi models without problems. You will find information for this on the Internet.
Raspberry PI 3B +
I assume that you have some knowledge on how to «get started» your Raspberry but when in doubt the best thing is to pull people who really know about these things and follow their steps and recommendations, point by point. In this sense and how little could I add to what others have already written as much more knowledge of cause, here I leave you the necessary links so that you can properly configure your minicomputer:
Setting up your Raspberry Pi . In English. Nothing better than going to the Raspberry Foundation to learn how to start up our device.
It is important to consider that although in the previous links you can find other alternatives, it is recommended that you install the «official» Raspberry (Raspbian) operating system in order to develop our Magic Mirror project. So there is no doubt about it, in this link you will find the necessary files. Keep this in mind if, as usual, you use Noobs (a quick installation tool with different operating systems to choose from) when configuring your Raspberry.
Finally and as you will quickly see, it is precisely at this moment when you are going to need to use the keyboard and mouse that we mentioned among the «necessary», at the beginning of this tutorial, in order to configure your Raspberry.
Note that since the Raspberry is going to be hidden behind the mirror along with other devices that will obviously generate heat, it is important to ensure its adequate ventilation to avoid unnecessary “heaters”. It will be enough to guarantee some ventilation holes in the frame and equip our microcomputer with the typical heatsinks and a small fan.
Installing and configuring the Magic Mirror
And the great moment has arrived! Finally we are going to start with the installation of the necessary software so that our Magic Mirror comes to life.
Once we have properly configured Raspbian on our Raspberry, it is time to install the necessary packages for our Magic Mirror. The most recommended, as always, is to go to the original source and follow, step by step, the indicated instructions. In this regard, here I leave you the necessary links where you will find all the information to proceed correctly:
Raspberry Forum on Magic Mirror. In Spanish. It is always a good idea to take a tour of the many existing forums in the Magic Mirror community to clarify any doubts that may arise.
Configuring the modules of our Magic Mirror
One of the most interesting features of the Magic Mirror in my opinion is its modular character. That is, once the basic package that already comes with default modules is installed, an immense range of possibilities opens up to install infinity of third-party modules developed by the active community around these types of projects.
Most of the modules (not always) indicate how to carry out the installation, which is always similar. In essence, it consists of cloning via console the repository that corresponds to the module chosen within the directory «/home/pi/MagicMirror/modules/» which, if everything went well, you should find in the indicated path. In addition, it is possible that in some cases you will be asked to install certain dependencies, all through your terminal. Once this process is done, you must edit the file “config.js” that you will find in the path “/home/pi/MagicMirror/config/” to include in it the basic configuration of the module as well as choosing between the different options that the author of the same proposes you.
Without a doubt, the configuration of the “config.js” file can be the most tedious and delicate part of the matter since we have already entered into the field of “codes” which for someone like me, little experienced in the matter, is obviously the most complicated. If you control over these issues and you are used to fiddling with Linux distributions, it will be a piece of cake, and if, as in my case, it is not so, then be patient and, above all, do not forget to always make a backup copy of the file «config.js” before making any changes to it.
However, it is not difficult to “get the hang of it”, especially if you follow the initial basic configuration examples that you will find in the software installation documentation itself. It is very important that you pay close attention to the syntax of the “config.js” file because any small error can prevent your Magic Mirror from loading correctly. In any case, if after any change in the configuration, the mirror does not start properly, look at the error line that the console will show you in order to solve it.
Likewise, if the module configuration requires it (it is not usual) or if you simply want to experiment with it, you can also make changes to the style configuration through the generic configuration file “custom.css” that you should find in «/Home/p /MagicMirror/css/» as well as the different «filename.css» of each module that you will find in their corresponding directories. Be that as it may, go ahead with my recommendation to handle these files with «prudence» and always make backup copies before you «fiddle» with the codes. You are warned!
Installing third-party modules
Perhaps the most «fun» part of the entire project. There are countless modules developed by the community that are the ones that really, once the default modules are installed, are going to give life and personality to your Magic Mirror.
Remember that the “default modules” that you will have in the initial installation, also accept configuration modifications. For if it is an idea and among other modifications that I have introduced in the default modules, in my case, the messages of the “Compliments” module are adapted to the weather forecast as well as the time of day. That is, apart from some generics, the advice offered will depend on the weather and the time of day. Likewise, in my case I use the «Calendar» module to know the forecast of the tides of the Beach in my city as well as the time of sunrise and sunset. For its part, the NewFeeds module is «duplicated», showing in one news from my area and in another international news.
Entering properly into the «third-party modules», in essence, there are two fundamental repositories to search and test third-party modules. You will find both on GitHub. Here are the links:
3rd Party Modules. The list of modules par excellence, ordered by subject. Most are «operational» but it is also common to find some «abandoned». It is all a matter of trying.
Legacy Modules. Alphabetically ordered list of modules. Sometimes you will find, basically, the same or previous versions of those already existing in the previous list. Also here you can find interesting and fully operational modules.
Third-party modules installed in my project
During these months dedicated to the construction of the Magic Mirror, I have tried infinity of modules (not all the existing ones, far from it, of course) until the end I stayed with the selection that I will relate below. Of course, this is absolutely arbitrary and the modules to install will depend exclusively on your needs, tastes and preferences. You will find all the indicated modules in the previous links, especially in the first one (3rd Party Modules).
Since, as I indicate, this is a very personal matter, I will limit myself to simply mentioning the modules that I currently have installed (you never know what will happen tomorrow) and I will comment on some aspect that you may consider of interest about them:
MMM-pages. Essential if you plan to install many modules. It allows you to organize them on different pages. There are other interesting alternatives to achieve something similar, such as MMM-Carousel that allows you to “switch” between modules.
MMM-UVIndex. Module that informs me about the intensity of UVA Rays in my locality.
MMM-AirQuality. It indicates the air quality in my locality.
MMM-Tools. Essential to know how your “Raspi” is going. I use CPU, RAM, temperature and others …
MMM-Buller. The solution that I use (very useful for me) to visualize my Google Task tasks in the mirror.
MMM-CalendarExt2. Something complicated to configure but very versatile. A very complete alternative to the default calendar.
MMM-DarkSkyForecast. One of the many modules on time available. Very visually appealing and easy to set up.
MMM-TouchPlayerBasic. A music player as simple as it is not very useful. Essentially a curiosity.
MMM-network-signal. Well that.
MMM-GoogleFit. A very curious but somewhat limited module that allows you to view your activity synchronized with Google Fit.
MMM-GoogleFit2. The same but for a second person.
MMM-BackgroundSlideshow. Allows you to place a series of background images (occupying the entire screen) and automatically rotate between them.
MMM-SimpleLogo. Well that. An easy way to place a specific image in any space.
MMM-NewsFeedTicker. A very «cool» module although it can be improved. You can configure news sources that will be happening in a strip (typical of the news).
MMM-Widget. It allows you to insert any type of Widget into your Magic Mirror. In my case, I have three dedicated to my favorite football team inserted.
MMM-LocalTemperature. Paired with the DHT22 sensor that we discussed earlier. It allows me to know the temperature and humidity inside.
MMM-TelegramBot. Very interesting. It allows you some control over your Magic Mirror through, obviously, Telegram.
MMM-Cursor. A simple mouse cursor useful when the mirror gets rebellious or you want to do some simple operation. Obviously, you have to have a wireless mouse connected to your Magic Mirror.
MMM-GroveGestures. We also discussed something in the previous installment. Paired with the sensor Sensor PAJ7620u2 (Grove Gesture) allows gestures to control the mirror. Without a doubt, a very interesting alternative about whose possibilities you have already been able to visualize a small demonstration in this video already published in this same tutorial. Given the interest that I understand this module can arouse, we will dedicate a special section to it later.
MMM-page-indicator. It indicates to us, by means of a small circle located at the bottom of each page, the number of pages of your Magic Mirror and which one you are on. It has no more function.
MMM-ImageSlideshow. It allows to insert an image in a simple way. I use it for a small «menu» reminder of the gestures I use and that I have posted at the bottom of all pages.
MMM-MotionDetector. Among other functions, it can be used to program the screen on and off based on the movement detected by a camera. Although it worked perfectly, right now I have disabled it and removed the camera from the Magic Mirror for simple security reasons. The question of turning the screen on and off has finally been solved with the SONOFF wireless switch already mentioned in the previous installment and with the MMM-GroveGestures that offers an option in this regard through gestures.
MMM-GooglePhotos. Obviously, a module that allows you to view your photo albums from Google Photos. It works without problems although at the moment I have it disabled since I have the impression that it consumes excessive resources and slows down the entire system, not to mention that it directly «knocks it down».
MMM-LocalTemperature
MMM-UVIndex
MMM-Tools
In which areas of the screen do I place my modules?
Well, this is not a minor issue, especially when you start accumulating modules and more modules and the «available» space is running out. As I have already indicated, there are solutions if your intention is to fill the Magic with modules but it is also relevant to know the different «areas» or «regions» where you can locate the information to be displayed by your modules. Most of them will tell you which is the best area to locate them although, in many cases, it will only be an optional recommendation (not in some modules that «only» will work correctly for you in the location that their author indicates). For all this, this simple graphic explanation of the different useful areas of your Magic Mirror when organizing the modules was very useful to me:
And here the explanation of the previous color codes:
top_bar and bottom_bar are light gray.
top_left and bottom_left are red.
top_center and bottom_center are blue
top_right and bottom_right are green
upper_third is yellow
middle_center is cyan
lower_third is magenta
And since “well-born is to be grateful”, here is the original link from where I obtained the above information.
Something more about the MMM-GroveGestures
Looking for a system to interact with my Magic Mirror, beyond the voice control that did not motivate me especially, having already experimented a lot with the Alexa and Google Home devices and not being especially novel, I stumbled upon the MMM_GroveGestures module. Through it and with the aforementioned PAJ7620u2 sensor (Grove Gesture) connected to our Raspberry through, obviously, the appropriate pins of the GPIO, it is possible to control your Magic Mirror by gestures from a maximum distance (approximately) of about 20 cm. It offers by default nine different gestures (UP, DOWN, LEFT, RIGHT, FORWARD, BACKWARD, CLOCKWISE, ANTI-CLOCKWISE AND WAVE) but, in addition, it allows you to perform combinations of two, three or more movements with them, which multiplies the possibilities exponentially. Logically, if you create many «combinations of gestures», in addition to testing your memory, you will also increase the chances of errors when executing them since the sensitivity of the sensor is quite remarkable.
This system will allow you not only to send notifications to your Magic Mirror and to those modules that accept such functionality but also and this seems very relevant to me, executing commands with your Raspberry as if you were working with the console.
This system will allow you not only to send notifications to your Magic Mirror and to those modules that accept such functionality but also and this seems very relevant to me, executing commands with your Raspberry as if you were working with the console.
For example, in my case I have a series of gestures linked to the «mpg123» program, which allows me to listen to music from the external hard drive integrated in the mirror (a Playlist previously configured to be specific) as well as increase and decrease the volume, between other functions. Although it would obviously be easy to integrate a few simple speakers into the Magic, right now and until I find the right ones, I use an external speaker connected by bluetooth or cable, depending on your mood.
As I have already mentioned and among other possibilities, you can also use the sensor to activate your screen or, after the time you specify without receiving any gesture, get it to turn off automatically. In short, multiple options that I encourage you to explore.
Final assembly of the Magic Mirror
Obviously, at some point, we will have to do the «assembly» of the entire invention. That is to say, place our Raspberry, screen and other elements within the structure that we have manufactured for our Magic Mirror. Since the possibilities in this regard are endless and will depend largely on our preferences and objectives, I limit myself to sharing some images of the «guts» of my Magic Mirror that I hope will be useful to proceed with the final assembly of it:
And there is more?
You are right. There is much more but, for now, I have come this far and I think I will not continue to delve much deeper into the issue either, since I am relatively satisfied with the final result of my project, even if it is ugly that I say so.
Just as a point, and as an example of other existing possibilities, I do not forget the implementation of the project with voice control (both with Alexa and Google Home), for which there are numerous module options , or something that seems to me even More interesting as well as complex, such as facial recognition and the possibilities of personalized response of the Magic Mirror that it offers. In the links to the third-party modules you will also find proposals in this regard.
What will be next?
As I said almost at the beginning of the post, when you start it is really difficult to stop with these types of projects given the number of possibilities it offers. Although I have already officially terminated the Magic Mirror, it is no less true that I am waiting to receive a PIR sensor and a KY-040 rotary switch so I can continue «experimenting» although, honestly, I do not know if I will have free pins at the GPIO to continue connecting gossips to the Raspberry.
Es imperativo que el Gobierno de Canarias recapacite y encuentre urgentemente el adecuado “abono” para que sus algo alocadas iniciativas no marchiten su crédito político antes de tiempo.
Fernando Pellicer Melo
Cerca de cuatro meses han transcurrido desde que el denominado “Pacto de las Flores” accediera al Gobierno de Canarias. Más de cien días de cortesía no escrita que supuestamente hay que contemplar antes de entrar a valorar la gestión de cualquier nuevo equipo de gobierno. Cortesía que ha tenido que quedar en suspenso al comprobar que entre sus iniciativas se encuentran la profundización en la privatización del sistema público educativo, el despido de cientos de docentes interinos o la imposición de un brutal recorte salarial al profesorado para 2020. Podrían parecer exageradas las afirmaciones anteriores pero a los hechos nos remitimos.
La Consejería de Educación ha anunciado como próxima “medida estrella” la tan demandada ampliación de la oferta educativa de 0 a 3 años, cuestión más que loable si no fuera porque tal anuncio va acompañado de un sesgo cuanto menos preocupante: la oferta educativa para tal etapa se pretende extender manteniendo y potenciando la doble red de centros privados concertados y centros públicos, es decir, dejando en manos de las aspiraciones de rentabilidad económica del empresariado la implantación de buena parte de esta fundamental etapa educativa cuestión que, desde todo punto de vista, no es lo esperable de un gobierno pretendidamente “progresista”.
Sumémosle a lo anterior, entrando en el terreno de la gestión de personal, el empecinado intento de la Administración educativa de imponer un modelo futuro de gestión para las listas de empleo docente que supondrá el despido de cientos de interinos con menos de 3 años de antigüedad laboral; añadamos la extremadamente chapucera ampliación de Listas de Empleo aún en curso y que está generando más polémica y recursos que soluciones, o la incumplida promesa (ciertamente realizada de forma algo “alegre” por la anterior Administración) de actualizar las listas de empleo del cuerpo de maestros tras las oposiciones 2019, cuestión que no ha ocurrido para desesperación de miles de personas que ven frustradas sus expectativas laborales. Si a esto le agregamos la existencia, en pleno mes de noviembre, de un importante e indeterminado número de vacantes docentes aún sin cubrir (léase alumnado sin su correspondiente profesorado) creo que no hacen falta calificativos para definir la actuación de la Consejería de Educación en materia de personal.
Sin embargo y obviando otras cuestiones no menos relevantes, la “traca final” o al menos la más reciente, llega con el Proyecto de Ley de Presupuestos 2020 para la Comunidad Autónoma. De justicia es reconocer el incremento en materia de inversión educativa que contempla el mismo pero, siendo ello cierto no lo es menos que tal incremento nos sigue manteniendo tremendamente lejos de las necesidades de inversión reales en Canarias para, entre otros objetivos, abandonar el furgón de cola respecto al conjunto del estado español y colocarnos en la senda del cumplimiento de la legalidad vigente que permita alcanzar en 2022 el índice de inversión del 5% del PIB contemplado en la Ley Canaria de Educación. Imposible será que Canarias deje de aparecer en los últimos lugares de cualquier estudio que consideremos mientras sigamos sufriendo un déficit de 1.500 docentes respecto a la media estatal o mientras nuestro archipiélago siga padeciendo unas ratios de alumnado por docente muy por encima también de los índices medios del Estado. Estas cuestiones, esenciales para el progreso del sistema educativo canario, solo se pueden solventar mediante una inversión educativa adecuada lo cual, previsiblemente, tampoco se producirá en 2020.
Pero el proyecto de presupuestos también esconde una desagradable sorpresa para el profesorado canario que las organizaciones sindicales han tenido que desentrañar ante la falta de transparencia e información al respecto. Nos referimos concretamente al brutal recorte salarial que se propone para los docentes al no contemplarse para el próximo año el incremento pactado con todas las organizaciones sindicales en 2017, respecto al complemento de Sexenios, incremento que sí se contempló en 2019. Ello podría suponer una importante merma salarial para alrededor de 15.000 docentes que en muchos casos alcanzaría los 130 euros mensuales cuestión que, a nadie se le puede esconder, ni las organizaciones sindicales ni el profesorado en su conjunto estarán dispuestos a aceptar sin presentar severa batalla en defensa de lo pactado y de sus condiciones laborales.
En definitiva una situación más que preocupante que no augura el futuro tranquilo que todos deseamos en el ámbito educativo. Es imperativo que el Gobierno de Canarias recapacite y encuentre urgentemente el adecuado “abono” para que sus algo alocadas iniciativas no marchiten su crédito político antes de tiempo. Y, ¡por favor! que no sigan aludiendo algunos responsables educativos cansinamente a su supuesta “independencia” frente a las decisiones de los partidos políticos que sustentan el “Pacto de las Flores”. Están donde están porque han sido nombrados legítimamente por esos mismos partidos y toca, inequívocamente, enfrentar los hechos y asumir responsabilidades.
Para la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias si tu apellido es “Quesada” tendrás más posibilidades de trabajar como docente que si tienes la gran desgracia de apellidarte “Pérez”.
Fernando Pellicer Melo
La publicación de unas listas “informativas” por parte de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias, con casi 11.400 inscritos para la ampliación de las Listas de Empleo docentes, ha venido a confirmar la enorme “chapuza” que está suponiendo este procedimiento que va a condicionar el futuro laboral de miles de docentes en el archipiélago.
La Administración Educativa anterior y la actual han pecado de una enorme e irresponsable falta de previsión al permitir el agotamiento de las listas de sustituciones docentes, especialmente en Secundaria, Formación Profesional y Escuelas Oficiales de Idiomas, lo cual ha conducido a la convocatoria de este procedimiento urgente de apertura de 52 listas de empleo durante el presente mes de octubre, sin las más mínimas garantías jurídicas.
Amparada en la actual situación de urgencia generada por la propia Administración, dado que, a estas altura de curso, hay más de 300 vacantes docentes sin cubrir aún en los centros educativos de Canarias, la Consejería de Educación solo ha tenido en cuenta en el baremo de méritos de esta convocatoria la “nota media del expediente académico” de la titulación requerida para cada especialidad a fin de ordenar a los aspirantes a ingresar en las listas de empleo docentes. Esta incomprensible decisión envía un mensaje catastrófico a la sociedad en su conjunto y al personal aspirante a ingresar en la docencia en particular puesto que, a la postre, da igual los esfuerzos en formación que se puedan haber realizado, tras haber finalizado la carrera universitaria, o los idiomas que se dominen dado que nada de ello va a servir para obtener un mejor puesto en las listas y, en consecuencia, optar a un puesto docente en el sistema público educativo. Lo mismo ocurre respecto a la experiencia docente previa que, para esta convocatoria, no tiene ningún valor lo cual roza lo esperpéntico.
Sin embargo, lo más absurdo e injusto de esta situación, como ya se le había advertido reiteradamente a la Consejería de Educación, es que al solo tomar en consideración la nota media del expediente académico para ordenar a los aspirantes, sin incluir ningún otro apartado en el baremo de méritos y, peor aún, habiendo limitado dicha nota media a dos decimales en el formulario de solicitudes, se han producido miles de empates en la puntuación de los méritos que se han resuelto atendiendo a la letra inicial del primer apellido de los solicitantes, comenzando por la letra “Q”, tal como establece la Resolución de 15 de marzo de 2019, de la Secretaría de Estado de Función Pública para el año 2019 a efectos de criterio de desempate, lo cual resulta notablemente arbitrario.
Por otro lado, la Consejería de Educación, ahondando en la más absoluta de las improvisaciones, anuncia que de inmediato se procederá a efectuar nombramientos de sustituciones docentes de las listas “informativas” recién publicadas una vez comprobado, supuestamente, que los docentes a nombrar reúnen los requisitos de titulación exigidos por la convocatoria. Todo ello sin realizar la obligatoria publicación de las listas provisionales, abrir el plazo correspondiente de reclamaciones y finalizar el procedimiento con la publicación de las listas definitivas correctamente ordenadas. Se da la circunstancia de que hay cientos de inscritos en estas listas de empleo que alegan no figurar en dichas listas “informativas” por errores de la Administración y que, en consecuencia, no podrán optar a alguno de estos nombramientos al no existir ningún plazo de reclamaciones abierto lo cual los deja en el más absoluto desamparo legal.
En definitiva, para la Consejería de Educación del Gobierno autonómico si tu apellido es “Quesada” tendrás más posibilidades de trabajar como docente en Canarias que si tienes la gran desgracia, a efectos de la Administración Educativa, de apellidarte “Pérez”. Todo un despropósito que, más que probablemente, acabará de muy mala manera en los tribunales de justicia.
Dudo que se atrevan a mentarle la cuestión de las plantillas docentes en Canarias pero, por si acaso, sepa usted, que nuestro archipiélago cuenta con al menos 1700 docentes menos que la media del estado español.
Fernando Pellicer Melo
A su Majestad Dña. Letizia Ortiz, con mucha educación
Me entero por la prensa de su visita a Canarias para inaugurar el curso escolar en el Centro Público de Infantil y Primaria San Matías, en el bello municipio de La Laguna. Sin duda, un reconocimiento más que merecido por el impecable trabajo y trayectoria de dicho centro, al igual que ocurre con otros muchos del archipiélago.
Al objeto de no desviar el sentido último de esta misiva, si usted lo tiene a bien, dejaremos para otro momento mis seguramente intrascendentes opiniones sobre la institución monárquica que usted representa, por otro lado, sumamente fáciles de intuir.
Me preocupa más bien, observando el regocijo y alborozo con que nuestro gobierno “nacionalista” ha recibido la noticia, el que usted no disponga de la suficiente información para que, atendiendo a su condición de experiodista (donde hubo siempre queda), pueda tamizar adecuadamente, si así lo estima, las –probablemente- complacientes informaciones que nuestro Presidente, Consejera de Educación y demás jerarquías educativas le puedan trasladar. Todo ello, por supuesto, sin poner en duda el que su Majestad sea una persona perfectamente conocedora de la realidad social de sus súbditos.
Quizás los mandatarios autonómicos le indiquen, para empezar, el “enorme” esfuerzo que están haciendo para desarrollar la Ley de Educación Canaria, aprobada en 2014 por el Parlamento de Canarias, desplegando ante usted una pléyade de iniciativas y proyectos variopintos -algunos ciertamente de interés- con que nos han martilleado incesantemente en las últimas semanas a través de constantes comparecencias públicas (hay que reconocer que esta Consejera de Educación maneja como nadie los tiempos mediáticos). Sin entrar en el detalle de cada una de estas iniciativas, debería usted saber que está Administración incumple sistemáticamente uno de los objetivos esenciales de la citada Ley Canaria de Educación, esto es, alcanzar el 5% del PIB de inversión educativa en nuestro archipiélago en 2022. Lejos de ello, desde 2014 los presupuestos se han mantenido prácticamente estancados. Por citar un simple ejemplo, para que dicha obligación legal tuviera visos de cumplirse, el presupuesto educativo en Canarias tendría que incrementarse en 2018 en 214 millones de euros cuestión que, probablemente a nuestra Consejera de Educación le genere una apesadumbrada carcajada.
Dudo que se atrevan a mentarle la cuestión de las plantillas docentes en Canarias pero, por si acaso, sepa usted, que nuestro archipiélago –según los condescendientes datos del Ministerio de Educación- cuenta con al menos 1700 docentes menos que la media del estado español. Sin personal y recursos y más allá de la publicidad institucional, como usted fácilmente podrá comprender, difícil será que Canarias abandone en un tiempo prudencial el furgón de cola educativo en el que se encuentra, tal como reflejan todos los informes al respecto, tanto referidos al estado español, como a la Unión Europea o a la OCDE.
Quizá sí le mencionen el “tremendo” esfuerzo realizado para mejorar el salario del profesorado de Canarias, mediante la reciente firma de un Acuerdo Retributivo que permitirá introducir paulatinamente los sexenios en nuestro archipiélago a partir de 2018. Sin obviar la relativa valía de dicho acuerdo, podrá usted argumentar –si ello le complace- que ello no compensa ni de lejos los brutales recortes salariales y laborales padecidos por el profesorado Canario desde 2010, ni la incalculable pérdida de poder adquisitivo de los últimos 20 años, reivindicación a la que, obviamente, no vamos a renunciar.
En fin, estimada Dña. Letizia, conocedor de sus ingentes obligaciones laborales, no deseo entretenerla más de lo debido. Solo apuntarle, por si se terciara, algunas cuestiones que quizás pudieran alentar su curiosidad periodística cuando departa con los mandatarios autonómicos. Así por ejemplo, podría interpelarles sobre las ratios en Canarias (de las más altas del estado español) o sobre la imperativa necesidad de recuperar los horarios docentes previos a los recortes de 2012, superando la injustificable sobrecarga laboral actual o, quizá, ya puestos en faena, podría interesarse sobre cuales son las intenciones de nuestra Consejera de Educación respecto a los miles de docentes interinos de Canarias, cuyos puestos de trabajo penden de un hilo si se llegaran a convocar oposiciones masivas sin previa negociación sobre el actual sistema de acceso. Y si por casualidad, le sobrara tiempo, no estaría mal tampoco que se interesara sobre la incesante querencia de la Consejería de Educación por cerrar centros educativos públicos mientras se esmera en subvencionar centros concertados religiosos y no que, entre otras veleidades, muestran notable tendencia a discriminar a las mujeres en sus contrataciones de personal docente.
Sin otro particular, reciba un cordial saludo y quedo a su entera disposición.